¿Buscamos intencionadamente información falsa cuando se trata de ejercicio físico?

Alfonso M. Arce el 27 oct, 2022

Hace tres años arrancó el blog ‘Que la Fuerza te Acompañe’ con la imagen que abre este artículo. Su primera entrada insistía en una simple idea que no he traicionado jamás en todo este viaje: es fundamental entrenar la fuerza. Encontré un guiño, demasiado simple u obvio quizás, con el famoso lema de los Jedis… y carretera y manta. Tres años.

No soy periodista, soy un asaltador de espacios que posiblemente nunca deberían haber sido míos. Por causas personales y ganas de saber, me he formado durante bastante tiempo en diferentes cursos, seminarios y titulaciones relacionadas con el entrenamiento físico y, cuando nació ABC Bienestar, levanté la mano pidiendo un huequito para hablar de entrenamiento de fuerza. Eso en nuestra sociedad suena a rareza total. En un medio generalista no os quiero ni contar. Es algo así como presentarse voluntario para que te dejen ir a un despacho en una esquina a declamar poesía en griego. Pero van tres años.

Mi motivación personal ha sido aprender, no enseñar. Aprender a comunicar y comprobar lo complejo que es hacer que la mayoría de personas tengan un interés real hacia el ejercicio físico. Salvo contadas excepciones, me dan ganas de arrancarme los ojos cada vez que leo un artículo sobre entrenamiento en los grandes medios nacionales. Hace poco hablando con un profesional como la copa de un pino, con 37 años de experiencia en los mejores gimnasios de Madrid me dijo, «Alfonso, no te molestes, la gente no quiere saber nada ni le interesa nada. Quieren sudar un poco e irse».

Él sabe infinitamente más que yo, así que le voy a dar la razón. Además se la doy porque la tiene. Porque tenemos la guerra, tenemos la inflación, tenemos las hipotecas… y llega el imbécil que escribe estas líneas y hace guiñitos a la Guerra de las Galaxias para contarte que la sarcopenia te está dejando inútil y que, si no te pones las pilas, acabarás necesitando asistencia para cualquier tarea diaria. Un asco. Es normal que prefieras conocer un método japonés que en tres minutos te promete un cuerpazo, o cómo sacar tableta sin hacer abdominales. Nos encanta devorar esta información que contiene una verdad a medias mezclada entre toneladas de mentiras como pianos.

Hay quienes se quejan porque les timan en los talleres mecánicos, pero en toda su vida ni han mostrado interés por saber cómo hinchar una rueda. En algún momento vas a necesitar el ejercicio, vas a tener una lesión que recuperar, vas a tener un problema de salud para el que te van a prescribir ejercicio, vas a tener que hacerlo para liberar el estrés, o vas a tener que hacerlo a la fuerza cuando por no haberte preocupado jamás de ello, tengas serios problemas de dependencia.

Y sí, a la gran mayoría esto le da exactamente igual. A quienes han leído con interés alguno de mis artículos, GRACIAS. Merecer vuestro tiempo es algo con lo que me doy por satisfecho. Es mucho más de lo que tienen algunos, algunas y algunes. Si encima he abierto los ojos a alguien, aunque sea una sola persona, para tener una vida más activa y saludable, ya ha tenido sentido.

Os dejo una selección de algunos artículos clasificados con la intención de ahorrarte tiempo de navegación y que leas sobre lo que te interese, te guste o más te apetezca saber. No están todos los que son, pero son todos los que están. Que la fuerza os acompañe:

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