José Manuel Otero Lastres el 07 jul, 2020 Siendo España una nación claramente europeísta, no son muchos los ciudadanos que siguen, aunque sea de lejos, los avatares de la Unión Europea, a la que vemos más como aportadora de fondos para nutrir nuestra maltrecha economía que como organización subregional, formada por 27 países para gestionar los asuntos económicos, sociales, jurídicos y políticos de los Estados miembros. Pues bien, en los dos últimos años, la Unión Europea, a través de su Parlamento, adoptó dos acuerdos políticos de gran significación política que pasaron bastante inadvertidos en nuestros medios. Así, el pasado dieciocho de septiembre de 2019, el Parlamento europeo aprobó una resolución común sobre la importancia de la memoria histórica europea para el futuro del continente, en donde se condena expresamente los horribles crímenes cometidos por los nazis y los comunistas en toda Europa sin excepción. Se trata de un documento oficial con rango normativo indirecto que ha sido promovida sobre todo por eurodiputados cuyas naciones han vivido durante décadas bajo la tiranía comunista (las de Europa del Este), pero que sin duda acaba afectando jurídicamente a toda la Unión Europea. La resolución europea tiene en su punto de mira el Tratado internacional entre Ribbentrop y Molotov (es decir, entre los nazis y los comunistas) para repartirse Polonia en 1939, y rescata del olvido que los comunistas se sumaron de forma entusiasta a las ambiciones nazis de ampliar sus zonas de influencia hacia el Este. Pues bien, aunque en España este compadreo trate de mantenerse intencionadamente en silencio, en Europa se percibe como una verdad incuestionable. El segundo acuerdo se adoptó a principios de enero de este año. La Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo aprobó constituir una misión de investigación para tratar de conocer los motivos por los que siguen sin resolverse 379 asesinatos de la banda terrorista ETA. El acuerdo para constituir esta comisión fue promovido pro Ciudadanos a través del grupo “Renovar Europa” y se adoptó con el apoyo de Partido Popular, Ciudadanos y Vox. El PSOE y Unidas Podemos no se sumaron al acuerdo. Esta misión, de la que todavía no se conocen los eurodiputados que participarán en ella, tiene previsto constituirse en este segundo semestre de 2020, y se formará gracias a que el representante de Dignidad y Justicia, Miguel Ángel Rodríguez Arias, alertó a la Eurocámara de que las autoridades españolas no había cumplido su deber de llevar a cabo investigaciones oficiales, efectivas e independientes para que los responsables de dichos asesinatos fuesen perseguidos y llevados ante la Justicia. Convendría levantar el manto del silencio con el que determinadas fuerzas políticas interesadas quieren hacernos olvidar acontecimientos históricos vergonzosos, como la reseñada colaboración entre nazis y comunistas. Se dedican con ahínco a levantar ciertos trapos sucios de nuestra reciente historia y llaman fascistas a otros olvidándose de su propia historia. Y por si esto fuera poco tratar de lanzar al rincón del olvido la posible existencia de pactos ocultos para acabar con el terrorismo de ETA, gracias a los cuales sus herederos están participando e infiltrándose en nuestras instituciones sin verse perseguidas por la acción de la justicia. Política Comentarios José Manuel Otero Lastres el 07 jul, 2020