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Blogs Fahrenheit 451 por Pablo Delgado

El misterio insondable de las ideas

¿Qué son las ideas?, ¿de dónde vienen?, ¿cómo podemos obtenerlas, ordenarlas y compartirlas?

El misterio insondable de las ideas
Pablo Delgado el

Según la R.A.E. insondable es aquello «que no se puede averiguar, sondear o saber a fondo». Hay misterios del hombre que encierran múltiples estudios y significados de los que no se para de aprender y buscar. El mundo de las ideas es uno de ellos. Ideas entendidas desde su creación en la mente del hombre. Todo ser humano tiene una idea. Más bien millones de ideas a lo largo de su vida. Pero ¿cómo nacen?, este es uno de los interrogantes necesarios para conocer nuestro cerebro. Esa «máquina» que se encuentra en la parte alta del cuerpo y que nos aporta consciencia, y nos dá aquello que nos diferencia de los semejantes, y sobre todo, de las demás especies que habitan el planeta.

Un idea hasta que no la ponemos en práctica no puede llegar a ser una idea, ya que si no la compartimos o la experimentamos se llegará a perder en lo más profundo del cerebro y solo la conoceríamos desde dentro. Ellas son necesarias para aportar soluciones, originalidad, diferenciación y pragmatismo (sobre todo las buenas) en la vida de los seres humanos, a través del conocimiento y la cultura se podrá obtener cotas más altas en esa obtención necesaria de ideas.

Pero, ¿cómo son?, ¿tienen forma?, ¿de qué están hechas? «Las ideas tienen forma virtual en el espacio de la mente, formas inestables y efímeras que la intuición descubre y la razón explica. Esas ideas que se forman en la mente siguen la lógica de la simplicidad en su búsqueda de conocimiento o de soluciones a problemas. Y la manera más apropiada y eficiente de explicar esas ideas es ‘traducirlas’ mediante los lenguajes visuales que tienen la capacidad de mostrar y de demostrar: las imágenes y los esquemas», escribe el diseñador, sociólogo, comunicólogo y metodólogo Joan Costa (1926) en su obra La Forma de las IdeasCómo piensa la mente. Estrategias de la imaginación creativa (Experimenta libros). 

Costa es un pionero en la comunicación visual y en concreto en Esquemática, la ciencia de los esquemas, una disciplina nueva que estudia cómo obtener el mejor resultado visual para exponer y resolver problemas aportando soluciones sencillas y efectivas. Autor de 50 libros sobre Imagen, Comunicación, Diseño e Innovación es una voz más que autorizada para exponer y aportar soluciones a esa gran maraña que pueden llegar a ser los impactos visuales y comunicativos que atravesaron del diseño en busca de soluciones.

En esta nueva edición actualizada y ampliada aborda el reto de ayudar a pensar. Algo muy necesario e imprescindible y más si nos dedicamos a una actividad creativa. Y lo hace combinando el rigor, la imaginación y sobre todo la experiencia. Va en busca de la génesis y el proceso de la ideación, ese movimiento creativo de la mente que se produce en el interior o como lo describe Costa de esa «caja negra».

Es obvio que los objetos que nos rodean no nacen de la nada, siempre ha habido una causa o alguien que provoca esa «explosión» en la mente que hace que conciba una idea para luego elaborarla y hacerla visible y tangible. Ésta causa es la que Costa desentraña y desmenuza con un gran saber hacer, los mecanismos causales que necesariamente se centra en tratar de comprender cómo se forman las ideas en la mente y cómo se produce el sentido que les es consustancial… para finalmente discernir cómo se rectifica esa intuición en un lenguaje gráfico que la mirada llegará a entender.

«Tener una idea o hacerse una idea es tener una noción, aunque sea difusa, un conocimiento elemental o un concepto mínimo de algo. Tener una idea es, un paso más adelante, haberse formado una opinión, un concepto o un juicio de una persona o una cosa». Como decía antes, se pueden tener muchas ideas, pero ¿cuál es la buena? Aquí se puede decir que está la creatividad de la persona, saber cuál de esas ideas llegará a ser la buena. «La creatividad no es una creación libre, lúdica y gratuita. Está supeditada a un brief o un pliego de condiciones técnicas, y éstas a su vez lo están a unos objetivos que han sido predeterminados por alguien que es ajeno al creador y al resultado de lo que se ha creado (…) Toda innovación es la puesta en obra de una relación inédita entre elementos que antes no habían sido relacionados».

Independientemente de cómo funcionan nuestras neuronas y cómo se conectan unas con otras, aquí se encuentra la madre del cordero, «el pensamiento creativo que es esencialmente combinatorio. Asocia ideas, combina cosas que habitualmente están disociadas y sin relación entre ellas». Por lo que «las ideas son formas flexibles, modificables y con ellas buscamos, tanteamos alternativas, intentamos perfeccionarlas para ajustarlas a una intencionalidad, un proyecto o un designio: llevar la idea a la práctica. Hacerla comunicable y realizable.»

La obra de Costa es muy didáctica y original, ya que pone en valor enseñanzas científicas que podrían resultar difíciles para aquellos que no estamos familiarizados con el lenguaje, pero que el diseñador «traduce» para llegar a ser entendibles, además, aporta expresiones y visiones originales de cómo la comunicación de las ideas ha ido evolucionando e incluso cómo se puede encontrar miles de años atrás, mediante la evolución del cómic, la pintura, la fotografía, la ilustración, la arquitectura, el diseño e incluso la tipografía. Elementos que necesitan ideas, la esencia de la ideación y de su culminación, que desembocará en parte de ingenio o genialidad. «Una idea no es producto reactivo de la simple lógica binaria del estímulo y la respuesta, sino que lo aleatorio, lo imprevisible y la complicidad del inconsciente introducen una interesante lógica heurística más compleja y en nada comparable con un proceso mecánico.»

Reducir a lo esencial lo que está envuelto entre los elementos complejos es cómo define Costa la esquematización, el modo de pensar a través de representarlo simple. «Las ideas son tanto más claras cuando más fáciles de enunciar, ya sea con palabras o con la ayuda de unos trazos sobre el papel y, por tanto, cuando son más inteligibles para el analista, el observador o el que debe aplicarlas o utilizarlas.»

En definitiva, «las ideas son imágenes mentales, productos de la imaginación», por lo tanto, hay que exteriorizarlas, ponerlas en común, darles un valor tangible para que no desaparezcan y así existan y puedan ser insertadas en el entorno, ya sea visual o físico, y gracias a Costa, se pone en valor esa acción de cómo pensar y cómo expresar, de la importancia que tienen los gráficos y los diagramas que ayudan así a desarrollar lo que hay en la mente, esos modelos previos al objeto real que deben ser estimulados por medio del conocimiento, y este ensayo cumple dicha función aportando IDEAS y estimulando la creatividad del lector, para llegar a ser consciente del camino que debe tomar cuando se enfrente a un problema concreto.

La Forma de las Ideas. Cómo piensa la mente. Estrategias de la imaginación creativa // Joan Costa // Experimenta libros // 2019 // 22 euros

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