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Blogs Puentes de Palabras por José Manuel Otero Lastres

La administración de la justicia y el doble respaldo de la voluntad popular

José Manuel Otero Lastres el

Según la Constitución, la justicia emana del pueblo y se administra por los jueces y magistrados. Añade nuestra Carta Magna que en ese mismo pueblo reside la soberanía popular y que de él emanan todos los poderes del Estado. Finalmente,  preámbulo de la Constitución señala que el Estado social y democrático de Derecho, que es la vestidura jurídica de la Nación Española, asegura el imperio de la Ley como expresión de la voluntad popular.

Lo que acabo de reseñar pone de relieve el importante papel que tiene el pueblo español en el ámbito de la Justicia. Y nos advierte de que la actuación de los jueces está respaldada por la voluntad popular incluso doblemente : aplican la ley que es expresión de la voluntad popular y al hacerlo están administrando la justicia que emana del pueblo. La conexión entre justicia, jueces y pueblo no puede ser, pues, más intensa. Como afirma hoy en ABC, Celso Rodríguez Padrón, presidente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, “no hay Estado de Derecho sin un Poder Judicial, ya no solo independiente, sino que además tenga el respeto de la sociedad a la que sirve”.

Viene todo esto a cuento porque el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, el Magistrado Manuel García Castellón, ha denunciado ante la Policía Nacional que está siendo acosado en las redes sociales, recibiendo incluso amenazas de muerte, por haber elevado una resolución razonada al Tribunal Supremo sugiriendo que se llame a declarar como investigado a Pablo Iglesias por el llamado Caso Dina.

La libertad de expresión no puede amparar a los acosadores no solo por el respeto que merece el ciudadano Manuel García Castellón en lo relativo a su derecho constitucional a la intimidad, sino también y sobre todo porque al instruir la causa contra Pablo Iglesias estaba aplicando la justicia que emana del pueblo español. El juez no se salió de su función constitucional de aplicar la justicia y las respuestas lícitas que tiene su actuación son los recursos contra su decisión y la crítica sin insultar de su decisión.

Pero a la minoría de furiosos y descerebrados acosadores les importa un bledo el pueblo español y la justicia, por mucho que después hablen una y otra vez hasta llenárseles la boca de que hacen todo por el pueblo y para el pueblo. Hay que desenmascarar a estos jugadores de ventaja que hacen constantemente trampas y viven en la atmósfera putrefacta del engaño. Y que usan torcidamente las libertades que confiere la Constitución para atacar a quienes administran la justicia en nuestro nombre.

Y es que si, como no se cansa de afirmar Pablo Iglesias, su causa, como todas las anteriores, va a ser archivada en el Tribunal Supremo ¿a qué viene acosar con amenazas de muerte a quien administrando justicia ha elevado la causa al Tribunal Supremo? ¿A qué viene atemorizar y tratar de desprestigiar alevosamente y sin dar la cara en los redes sociales a un juez independiente que al aplicar la justicia no ha conspirado contra nadie ni actuado caprichosamente? ¿No será que si acosan es porque tienen temor e intranquilidad a lo que pueda decidir dicho Tribunal?

 

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José Manuel Otero Lastres el

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