Se acaba de celebrar en Madrid la segunda edición del festival K-Week, una semana cultural sobre Corea que había sido planeada para 2020-2021, y que se tuvo que posponer por la pandemia. Espectáculos de bailes, conciertos, juegos, karaokes, exhibiciones de taekwondo, talleres para aprender a hacer nudos coreanos, caligrafía, maquillaje… El gran éxito obtenido queda reflejado en la participación de unas 11.000 personas, más del doble de lo previsto, que visitaron el festival en el Palacio Neptuno. La semana se cerró con una cena de gala en el Salón Real del Casino de Madrid ofrecida por el ministro de Cultura, Deportes y Turismo de Corea del Sur, Park Bo Gyoon, a la que fueron invitados representantes del gobierno español encabezados por la ministra de Industria, Comercio y Turismo de España, María Reyes Maroto Illera.
Con este motivo, el presidente interino de la Oficina de Turismo de Corea, Sangyong Shin, nos ha concedido una entrevista en el Palacio de Neptuno mientras se celebraba la K-Week.
Sr. Shin, ¿Cual es la situación actual de Corea del Sur en lo referente a la pandemia de la Covid-19?
Ahora realmente no hay muchos contagios, es verdad que los ha habido con anterioridad, pero su número se ha reducido considerablemente. Por eso se han flexibilizado las restricciones. Los turistas extranjeros pueden entrar en Corea sin estar vacunados y no tienen que hacer cuarentenas, sin embargo sí es necesario que se hagan una prueba PCR o un test de antígenos, exactamente igual que los coreanos que vuelven después de haber viajado fuera.
En cuanto a la documentación, los españoles no necesitan visado, solo tienen que rellenar un formulario de aduanas al llegar a Corea.
¿Qué ofrece Corea al turista español que no le ofrezca otro país?
Nuestra cultura está abierta hacia los extranjeros, aunque no estamos enfocados en concreto al turista español, sino a todos los del mundo. Durante los últimos dos años de pandemia hemos estado incomunicados. En este tiempo nos hemos desarrollado mucho en el sector tecnológico, incluso en su vertiente aplicada al turismo. Ahora los turistas que quieran visitarnos se pueden informar previamente por internet y, según sus intereses personales, planificar un viaje muy personalizado, a medida. Un viaje que incluya destinos con los gustos personales del viajero, ya sea arquitectura, historia… Corea tiene una gran oferta que incluye modernidad y tradición al mismo tiempo, el turista escoge.
Desde España puede parecer que Corea es parecido a China o Japón ¿Es esto cierto?
Bueno, a ojos de los europeos los tres países son muy parecidos, pero cada uno tenemos nuestro color especial, nuestro propio sello. Por ejemplo, nosotros vemos a Europa como un conjunto de países católicos, mientras que los europeos nos ven como budistas. Es verdad, los tres países tenemos un código cultural común, pero cada uno tiene su propio sello. Nosotros somos modernos, pero también tradicionales. En Corea conviven la modernidad y la tradición más fluidamente que en otros países. Tenemos una gran capacidad de adaptarnos al cambio, a las nuevas tecnologías y eso es lo queremos mostrar a través de la K-Week. Esto es algo que nos diferencia de Japón y de China.
Y para conseguirlo necesitamos a personas como usted para que hagan llegar a los españoles cómo es Corea realmente, cual es nuestra cultura. Por eso estamos ahora aquí en Madrid, para que nos conozcan.
Me consta que son muchos, pero ¿puede decirnos algunos de los principales lugares de Corea que un turista no se debe perder?
Toda la cultura coreana se basa en tres pilares fundamentales: la energía o dinamismo para adaptarnos al cambio; la alegría, que se traduce en fraternidad; y el cariño que lleva a la hospitalidad. Tres pilares que se parecen mucho a los de la cultura española.
Los lugares imprescindible son muchos, con ellos podríamos llenar un libro. Si al turista le interesa la historia tiene que ir a la ciudad de Gyeongju y a Puyo. También a Busan, ciudad costera candidata a organizar la Expo Universal de 2030.
Una propuesta muy interesante es la visita a los templos budistas que ofrecen paz, alojamiento, comida… Hay infinidad de posibilidades.
Una singularidad de Corea es su Zona Desmilitarizada (DMZ), una franja de seguridad, tierra de nadie, a lo largo de la frontera que separa Corea del Sur de Corea del Norte. Establecida tras promulgarse la tregua al conflicto armado intercoreano en 1953. Aún siendo el lugar más militarizado del mundo, poco a poco ha pasado a ser un destino turístico con visitas guiadas. ¿Sigue siendo la DMZ un atractivo turístico?
Sí, sigue siendo un destino turístico importante. Existe un programa que se llama “El Camino de la Paz”, que transcurre por un paraje que, al no haber estado habitado desde hace setenta años, conserva una naturaleza casi virgen. Hay una tranquilidad absoluta hasta tal punto que en algunos lugares se han instalado pantallas gigantes de vídeo que ofrecen espectáculos de danza, también aquí aplicamos nuestra tecnología más avanzada.
¿Puede estar tranquilo el turista que visite Corea del Sur a pesar de tener muy cerca un país como Corea del Norte?
El turista puede estar tranquilo, Corea del Sur es un país muy seguro. En este aspecto nosotros no tenemos la misma percepción que se tiene en el extranjero. Nos sentimos seguros. En la Zona Desmilitarizada de la que hemos hablado hay una tranquilidad absoluta a pesar de estar en la misma frontera. Es verdad que hay una tensión, pero se vive pacíficamente.
Kamsahamnida (gracias) Sr. Shin.
PERFIL
Sangyong Shin (Seúl 1963)
Presidente interino de Korea Tourism Organization (KTO)
Graduado en la Universidad de Corea con especialización en Historia.
Desde que se unió a la Organización de Turismo de Corea en 1989, ha trabajado durante más de 10 años en delegaciones japonesas de primer orden, como Tokio y Osaka.
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