Salvador Sostres el 26 mar, 2019 Yo creo que tras lo de López Obrador ya no queda absolutamente nadie para pedirle a España que se disculpe. Pedir que te pidan disculpas es como pedir que te amen: tiene poco valor lo que en este sentido te ofrezcan si has tenido que pedirlo, y es de vencidos suplicar a los demás los sentimientos que han perdido. En el caso concreto de México, que les descubrimos, es además un despropósito pretender estas disculpas. Más bien tendrían que disculparse los sucesivos gobiernos mexicanos por haber sido tan corruptos, tan necios y tan zafios, y por haber gestionado de un modo tan mediocre la Civilización que les entregamos. Por lo demás, juzgar con la mirada del siglo XXI lo que ocurrió en 1492 es una tontería que merece el desprecio intelectual de cualquier persona instruida. El Descubrimiento no tiene que avergonzar a España sino a quien lo cuestione con criterios de hace dos semanas. Incorporamos a México a la Civilización, le dimos el idioma, nos mezclamos con ellos -cosa que los ingleses puritanos no hicieron, confinando a los indios en las reservas- y les alejamos para siempre del atraso tribal, que no conduce a nada bueno. Y lo más importante: les dimos a Dios. Son patéticos los intentos, sostenidos en el tiempo, de criminalizar a España por ello, y es absurdo convertir la gloria del Descubrimiento en un acontecimiento de vergüenza ajena. La Historia está hecha descubrimientos, invasiones, guerras ganadas, incorporaciones, imperios. Es así como los hombres hemos sobrevivido en nuestro esfuerzo por ser libres. Todo se lo dimos a México y han robado mucho más estos politicuchos suyos que tantas disculpas exigen que lo que pudiera comportar aquello a lo que tan desfasadamente llamamos “saqueo” y que no fue más que el proceder normal, en aquella época, de los conquistadores cuando llegaban a tierra nueva. Además, y en cualquier caso, los antepasados de los habitantes actuales de España no pusieron pie en Mexico. Por esto estamos aquí sus descendientes. Los antepasados de López Obradors fueron a Mexico e hicieron lo que hicieron con los indígenas. De modo que si alguien tiene que disculparse, que tampoco lo creo, son ellos con ellos mismos. España no puede dejarse robar la Historia ni por independentistas, ni por podemitas, ni por corruptos gobernantes tercermundistas que por ignorancia o por tratar de disimular su ineptitud tratan de subvertir el orden natural de las cosas. Ninguno de estos grupúsculos puede presentar una hoja de servicios a la Humanidad como la que puede presentar la nación española. Es grotesco este español complejo de inferioridad, como de eterna culpa, que tan exagerado no lo tienen ni los alemanes por Hiter. López Obrador tendría que procurar no hacer el ridículo, gobernar sin robar -a ver si lo consigue- y solucionar los graves problemas que tiene México, en lugar de dedicarse a escribir cartas al Rey y al Santo Padre. ¡Como si no tuviera suficiente trabajo persiguiendo narcos, y asesinos aún peores, que probablemente tenga merodeando en su gobierno! No sería la primera vez, ni por desgracia la última. El mayor reto històrico de México es llegar algún día a estar a la altura de todo con lo que la Madre Patria os ofrendamos, queridos hijos nuestros. Otros temas Comentarios Salvador Sostres el 26 mar, 2019