El próximo cinco de febrero, China celebra su año nuevo. El año del cerdo. Y hoy lo hemos festejado nosotros en el hotel Gran Meliá Palacio de los Duques. Ahí, en el restaurante Montmartre 1889, el prestigioso chef chino Tang Weicheng prepara hasta el día 1 de febrero un menú especial enmarcado en las jornadas gastronómicas de China Taste, un proyecto que cuenta con la colaboración de la Embajada china en España. Se trata de la cuarta edición y en ella participan 14 restaurantes más aunque el Palacio de los Duques ejerce de hotel embajador. Las jornadas se extienden hasta el 24 de febrero.
Tang Weicheng nació en 1958 y lleva más de 40 años trabajando entre fogones. El Ministerio de Exteriores chino ha confiado en él para que liderase la cocina de la embajada de China en Berlín. Además, ha preparado comidas para distintos jefes de estado y ha sido calificado como cocinero jefe de cinco estrellas de la provincia de Jiangsu. En esta ocasión, el chef traslada hasta el centro de Madrid sabores de la ciudad china de Wuxi y de la región de Huaiyang, una de las cuatro regiones más importantes en la cocina del país. Y como es el año del cerdo, qué mejor que celebrarlo rindiendo homenaje en alguno de los platos. Así que, sin más rodeos, allá va el menú que hemos degustado en siete pasos.
Para abrir boca, comenzamos con unos aperitivos. Por lo diferente, comenzaré hablando de la gelatina de carne de cerdo salada. Me recordó bastante a la cabeza de jabalí pero bastante más gelatinosa. Además, probamos ternera escabechada, pepino sazonado con cebollino, gambas preparadas con posos, brotes de bambú endulzados con pimiento y una exquisita y muy, muy diferente lubina ahumada.
Continuamos con una sopa de hongo matsutake con tofu. Ya sabéis que no soy muy “setero” pero nunca he contado que tampoco soy un apasionado del tofu. Lo recordaba como un producto bastante soso y, quizá por cierto prejuicio, no me resultaba atractivo. Pero la presentación y el hecho de querer probar todo lo que me ponían delante me hizo darle una oportunidad. Y así fue, no quedó sopa. Sorprendente y diferente mezcla que nada tiene que ver con los sabores latinos.
Seguimos con unas bolitas de langostino. Un plato que me gustó bastante. Esa mezcla del langostino con el bacon ahumado y la trufa deja un gran recuerdo en la boca y me ha dado alguna idea que otra para cocinar en casa. No era un plato grasiento a pesar de la lámina de bacon. Apúntenla para algún domingo.
Si pasamos a los principales, en primer lugar tuvimos ocasión de probar las tres delicias clásicas de cerdo. Fue un verdadero homenaje al protagonista de este año y creo que fue mi plato preferido de la tarde. Una combinación exquisita de costilla al estilo Wuxi, bola rellena y empanadilla con huevas de cangrejo.
El segundo plato principal fue tofu escaldado en tiras con gambas y hongos salteados. Una delicia que simulaba a la anguila de agua dulce típica de esa región. Un plato peculiar ya que los hongos estaban salteados en una especie de garrapiñado (permítanme la licencia) dulce y suave.
Y para cerrar la ronda de principales, lubina al vapor. Servida en un plato hondo, acompañada de bambú y con una salsa ligera con aroma a soja. Muy rica también, la verdad.
Por último, para cerrar boca y antes del café, llegó el postre. Un pastel de arroz glutinoso con judía roja y sabor a osmanto que al principio resultó algo extraño pero que terminó siendo adictivo. Estaba presentado con un acompañamiento de pasas, pipas y piñones.
Por cierto con cada menú se hará un donativo a la Fundación José María de Llanos que presta una atención integral a mujeres que se encuentran en una situación de vulnerabilidad o riesgo de exclusión social.
¡Feliz año nuevo chino!
Precio y bebidas: 65 euros. Incluye agua y café.
Horario: disponible de 13.30 h. a 16.00 h. en horario de comidas y de 20.30 h. a 23.00 en horario de cenas.
Ubicación: Restaurante Montmartre 1889, hotel Gran Meliá Palacio de los Duques. Cuesta de Santo Domingo,5
Teléfono: 915 416 700
Cocina Exótica