La cuestión de si los políticos están bien pagados o no es bastante polémica. Lo cual contrasta con la postura de la mayoría de la gente sobre lo que ganan otros profesionales. Es evidente que en la postura de cada ciudadano influye si el salario en cuestión se percibe en el ámbito privado o si se cobra de las arcas públicas.
Se puede afirmar que en la empresa privada un sueldo elevado no suscita serios reproches. De una parte, el hecho de que la empresa utilice sus propios recursos para abonarlo invita a los ajenos a no inmiscuirse en el asunto, ya que cada uno hace con lo suyo lo que tiene por conveniente. De otra parte, está generalizada la opinión de que en este ámbito no se despilfarra, sino que se suelen imponer duras exigencias para remunerar el trabajo. Dicho con otras palabras, la gente no se mete en los salarios más elevados de las empresas privadas porque éstas pagan con sus propios medios y exigen a cambio acreditar una adecuada preparación.
Las cosas son distintas cuando se juzgan los sueldos de los políticos. De entrada, éstos cobran de lo que recauda el Estado a través de los impuestos. Y, en este punto, se produce la singularidad de que así como a la hora de defraudar a la Hacienda Pública o de saquear las arcas públicas mediante la galopante corrupción los ciudadanos tenemos poca conciencia de que nos están robando a todos, tratándose de lo que se paga “oficialmente” a los políticos tenemos una idea muy clara de que se les paga con nuestro dinero.
A lo que antecede hay que añadir que la gente sabe perfectamente que para ser político no se exigen requerimientos que solo cumpla una reducida porción de ciudadanos. Visto que no se requiere ningún curriculum para ser político, cualquier español cree que tiene legítimas opciones para acceder a tales cargos. Así las cosas, la ciudadanía compara lo que cada uno gana en su trabajo con lo que perciben los políticos, y como éstos suelen ganar bastante más que la gran mayoría, se piensa que están muy bien pagados. Puede haber otras razones, pero creo que estas dos están entre ellas.
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