J. F. Alonso el 01 jun, 2015 Cada una de las imágenes de National Geographic tiene algo de misión imposible (o de más difícil todavía). Sus fotógrafos suelen contar con entusiasmo el laborioso proceso de conseguir una imagen que “pase el corte” de los editores gráficos, que tenga la fuerza suficiente para que el lector se quede con los ojos pegados a esa página. La búsqueda de la perfección dura semanas o meses, incluso años. Así durante toda su historia, 127 años. Una vez, Ramón Larramendi, que viajó durante tres años por el Ártico para elaborar uno de esos reportajes, me dijo que sus editores eran tan meticulosos como para comprobar el color de los autobuses de un determinado pueblo citado en el artículo. La revista (papel reluciente) sigue vendiendo millones de ejemplares en todo el mundo, pero desde hace algún tiempo su actividad en internet y redes sociales es incesante. Su cuenta en Instagram -creada en 2012- suma 20,6 millones de seguidores, y sus fotos allí compartidas, más de mil millones de “me gusta”. Para celebrar una cifra tan redonda, sus responsables nos muestran una selección de las fotos mejor valoradas por los internautas. Un viaje con el objetivo abierto (también la boca) por los paisajes del mundo. Look into these eyes! Stop the demand and the killing can too. There are only 3200 tigers left in the wild! We need to fight for the right of tigers to live – peacefully and without being killed. @stevewinterphoto This image was from my @natgeo story “The Cry of the Tiger" Check out my NG Book “Tigers Forever” – this is the cub on the front cover photographed 10 months later! Join National Geographic's Big Cat Initiative, www.causeanuproar.org #bigcatsforever Check out WildAid – “When the buying stops, the killing can too” #wildaid – Watch the Nat Geo / WildAid PSA https://www.youtube.com/watch?v=81MKjmsnEgM #bigcatsforever @natgeo @wildaid @thephotosociety @natgeocreative @stevewinterphoto #photooftheday #photography#conservationphotography #love #tigers #cats #beautiful #me #follow #canon #wildaid #ivoryfree #eiainvestigator Una foto publicada por National Geographic (@natgeo) el 28 de Abr de 2015 a la(s) 8:34 PDT