Esta mañana he estado en la tertulia polÃtica de la Cadena SER con los secretarios generales de Comisiones Obreras, Ignacio Fernández Toxo, y UGT, Cándido Méndez, a los que han entrevistado con motivo del DÃa de los Trabajadores. Los he encontrado bajo de forma, taciturnos y con escaso Ãmputo para afrontar la difÃcil situación económica a la que se enfrenta España. Pero no me ha extrañado nada, y asà lo he dicho en antena, porque el gran problema de los sindicatos es su nula credibilidad ante la gente.
¿Cómo es posible que los que han sido cómplices de la polÃtica del gasto desmesurado, al apoyar sin escrúpulos el despilfarro del Gobierno de José Luis RodrÃguez Zapatero puedan aportar alguna solución al problema?
¿Cómo puede decir el señor Fernández Toxo que el gasto no hay que demonizarlo, si es el origen del endeudamiento de este paÃs?
¿Cómo pueden pedir transparencia al Gobierno si ellos no dan cuenta de sus ingresos y gastos, y mucho menos de los millones de euros que reciben en subvenciones de las arcas públicas?
¿Cómo pueden criticar los sueldos astronómicos de los banqueros, que yo denuncio, sobre todo los de las entidades de crédito que han recibido ayudas públicas, si ellos se gastan 800 euros en una comida de lujo y millones de euros en gastos de representación?
¿Cómo pueden criticar la reforma laboral si ellos la aplican a sus propios trabajadores?
Por favor, si alguien puede responderme, que me lo diga.
PD. La escasa participación en la manifestación en Madrid del 1 de mayo confirma lo que escribo. De hecho,UGT y CC.OO. han reconocido que han participado la mitad de trabajadores que en anteriores convocatorias. Los sindicatos ni entusiasman. ni convencen y los actuales dirigentes se han convertido en una rémora para su funcionamiento. Un nuevo sindicalismo, alejado de las estructuras arcaicas y apesebradas que tienen hoy, quizás puedan impulsar una nueva era del movimiento sindical.
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