La actualidad polÃtica está entrando en una catarata de despropósitos que estoy por entrar en modo desconexión y que me avisen, o cuando alguien tenga una mayorÃa para conseguir la investidura, o cuando decidan convocar nuevas elecciones. Entre tantas declaraciones, ruedas de prensa en la que uno le dice al otro que lo va a llamar para charlar un ratito,  pero que venga solo o en compañÃa de otro; y éste le responde por la mañana que sà que irá; por la tarde que no, que mandará a su equipo negociador, y de madrugada que es mejor dejarlo, esto es un espectáculo dantesco.
España no se merece esto y Pedro Sánchez y Albert Rivera deberÃan dejar de engañar a la parroquia. Y digo esto porque esta mañana he escuchado decir al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, decir con toda la naturalidad del mundo que, por supuesto, él va a ser presidente del Gobierno, puede ser, no lo dudo, y acto seguido lo argumenta diciendo que Podemos al final cederá y lo hará presidente. ¿Pero cómo va a ser eso posible si Albert Rivera, con él que ha firmado un pacto, ha dicho por activa y por pasiva que con Pablo Iglesias no va ni a la vuelta de la esquina?
Es que lo que ha dicho Sánchez es, sencillamente, mentira. Entre otras cosas, porque también ha dicho que su pacto con Rivera es una alianza de sangre y que cualquier acuerdo de gobierno pasa por ese pacto. Y para rizar el rizo del despropósito, Pablo Iglesias también ha dicho que con Rivera no se toma ni un chupito en el bar de la esquina.
¿Y no dijo Albert Rivera que nunca iba  apoyar al partido que no hubiera ganado las elecciones? ¿Pero qué tomadura de pelo es esto?
Señores polÃticos, ahorrénse ruedas de prensa, declaraciones absurdas y dejen pasar el tiempo y convoquen elecciones. Todo lo demás, es imposible.
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