Esta semana, durante mi participación en la tertulia polÃtica del programa 120 minutos de Telemadrid, me atrevà a apostar por una repetición de las elecciones autonómicas en Madrid, ante la cerrazón de VOX de pedir un acuerdo de gobierno firmado con PP y Ciudadanos. Un pacto a tres, con la firma de los tres partidos, y en el que VOX estuviera en la foto.
Fue una apuesta arriesgada porque siempre he sostenido que habrÃa acuerdo y que PP gobernarÃa la Comunidad. Y parece que el tiempo empieza a darme la razón. VOX empieza a ceder posiciones y, cada dÃa que pasa, rebaja sus condiciones para apoyar la investidura de Isabel DÃaz Ayuso, la candidata popular.
La razón no es otra que la pérdida de apoyos del partido de Abascal, si se repitieran los comicios. Es un hecho constatable que una parte del votante de VOX no volverÃa a darle la confianza. Lo dicen ellos, no yo. Decepcionados con la posibilidad de que su voto no vaya a servir para frenar a la izquierda, ya dicen abiertamente que volverán al PP, que el desahogo contra Rajoy, la corrupción y la gestión del problema catalán ya pasó.
En Madrid han pasado de exigir estar en el equipo de gobierno de Almeida y VillacÃs en el Ayuntamiento de Madrid, a no volver a hablar más del tema. En la Comunidad empezaron pidiendo sillones, se les vio demasiado el plumero; después reclamaron una foto con Ciudadanos, ya la tuvieron; dÃas después exigieron firmar un documento a tres, y ahora ya ha dicho Abascal que se conforman con un compromiso programático verbal. O sea, que si la investidura se retrasa más dÃas, terminarán por decirle al PP y a Ciudadanos que hagan lo que quieran, que ellos los van a apoyar gratis.
Ya les pasó en AndalucÃa, que mucho decir que el acuerdo estaba condicionado a que se cambiara la Ley de Violencia de Genero y, al final, no se cambió, pasaron por el aro y hoy viven un idÃlico romance con el PP y Ciudadanos.
Si es que lo llevamos diciendo hace mucho tiempo, que una cosa es lo que se dice cuando no se está en el poder, y otra muy distinta cuando se tiene o está a punto de alcanzarse.
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