¿Qué estarán pensando hoy los miles de exvotantes del Partido Popular que apoyaron a Albert Rivera y a Ciudadanos para que se convirtiera en el contrapoder del PP, al ver que ha pactado con el PSOE de Pedro Sánchez?
¿Alguna vez imaginaron que ese voto prestado iba a terminar en la misma urna que la de los socialistas?
¿Entregaron su voto a Rivera para, al menos en apariencia, apuntalara a Pedro Sánchez?
¿Pensaron alguna vez que su voto serviría para indultar la corrupción del PSOE en Andalucía?
¿Qué dicen hoy esos votantes de centro derecha de Ciudadanos?
Lo que sí me imagino es lo que estará pensando Albert Rivera que, con una inteligencia política que nadie le puede negar, ha sabido camelar a los desencantados con el PP y utilizar su voto para situarse en el centro del debate y con un beneficio personal, orillando, al menos de momento a Rajoy y a los suyos.
Todavía es pronto para analizar el partido completo. Hoy parece que no hay más líderes que Rivera y Sánchez, que acaparan telediarios y portadas de periódicos. Pero la batalla sigue camino de la lucha final: la de las próximas elecciones generales. Ya que el pacto de hoy es papel mojado, no sirve para nada.
PD. Y otra pregunta ¿Qué dirá el PSOE de este pacto en la consulta-timo del próximo sábado?
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