¿Si tuvieras que refugiarte en un momento del pasado, en cuál lo harÃas?. Una pregunta que tiene un significado muy amplio para todos aquellos que guardan recuerdos especiales ya sean buenos o malos del curso de la vida y de las personas que forman o han formado parte de ella. Momentos que se han disfrutado en soledad o en compañÃa, momentos que pueden girar en torno a una fecha, un lugar, una persona o ambos a la vez. Este es el caso del relato gráfico escrito y dibujado por Paco Roca, “La casa” editado por Astiberri. Una historia que desde la primera composición de las viñetas, fraccionan el tiempo y el espacio, ofreciendo un ritmo mellado y sincopado de movimientos discontinuos en las que no hay un baile silencioso entre lo visto y lo no visto, haciendo trabajar la mente del lector, mostrando lo que no se muestra. A partir de esta secuencia en la primera página, se abre un mundo sensorial cargado de emotividad, ternura, algún reproche, pero sobre todo familiar.
Los tres hermanos protagonistas que forman parte de esta historia, volverán un año después de la muerte de su padre a ese lugar, que quieran o no, les ha marcado en la vida: la casa familiar donde crecieron. Su intención, en primer lugar, es venderla pero a lo largo del recorrido que van haciendo de la casa, el jardÃn con sus árboles y plantas, hacen que se enfrenten a unos recuerdos en los que su padre siempre estaba ahÃ. Recuerdos que les irán haciendo reflexionar sobre lo importante que ha sido su figura sobre ellos. Ese recorrido sentimental abrirá en el lector, estoy seguro, unas puertas a sus propios recuerdos junto a su padre. La obra se centra en una figura principal como es la paterna que parece que va a lo suyo y que no transmite sus sentimientos a sus hijos, pero que al final no es asÃ, porque siempre ha velado por el bienestar de su familia.
Paco Roca, ilustrador premiado y con una amplia trayectoria editorial, consigue de forma magistral transmitir a través del drama ilustrado, todas esas sensaciones en una estructura narrativa, tanto visual como escrita, colorista y poderosa. A lo largo de la narración recurre al flashback para contar los recuerdos de los hermanos, utilizando el color como elemento narrativo diferenciador. Un color mate que acentúa la forma de los objetos transmitiendo un realismo a la viñeta, haciendo asà más veraz la acción trasladada al papel por el autor.
Mediante el dibujo, despierta cosas invisibles como las emociones y todo tipo de sensaciones y sentimientos, además todo ello reforzado por una lÃnea del dibujo con un gran potencial expresivo, honrada, directa y racional. Adjetivos perfectos para mostrar la belleza y complejidad del mundo fÃsico del que forma parte la casa y todos los que la habitaron.
Paul Klee dijo: “el arte no reproduce lo visible sino que hace visible cuanto toca”. En esta última obra de Paco Roca, con ecos autobiográficos que surgen de una necesidad de contar una situación que ha vivido de cerca al autor valenciano, hace visible con su arte el amor que toca de un padre hacia sus hijos y sus ganas de vivir todo ello expresado a través de la casa familiar en el pueblo.
“La casa” // Paco Roca // Astiberri // 16 euros
ArteIlustracionesLibrosMedios