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Blogs A la sombra de la Acrópolis por Begoña Castiella

Pelea por una lechuga

Begoña Castiella el

En toda Grecia hay mercadillos de frutas y verduras al aire libre. Una vez por semana en cada barrio de cada ciudad, siempre por la mañana, siempre con productos frescos y a los mejores precios. Se conocen como “laikés”, del adjetivo que significa “populares”. Y se venden también muchas cosas más, desde pinzas de tender la ropa hasta sujetadores, desde plantas y regaderas hasta garbanzos y bisutería.  Aquí tienen unas imagenes de uno de estos mercadillos un día cualquiera en un barrio de una ciudad griega:

 

 

Aunque Grecia presenta ya un inesperado superávit primario en sus cuentas del 2013, la realidad es que el 30 por ciento de la población sigue hundida en la pobreza, el paro es altísimo  y mucha gente compra ya solo en los mercadillos, buscando descuentos y  gangas a partir de las 2 de la tarde.

Esta semana los comerciantes de estos mercados se han puesto en huelga en las ciudades de Atenas y Tesalónica, protestando contra unas reformas que aparentemente mejorarán el funcionamiento de los mercadillos y de los puestos,cambiándolo por completo.. Los agricultores y vendedores que se ganan ahí la vida no están de acuerdo con estas reformas y se han puesto en huelga … regalando TODOS sus productos agrícolas. ¿El resultado? Multitudes peleando por lechugas o una bolsa de zanahorias. Afirman que las reformas solo beneficiaran a las grandes compañías y no a las mas de 50.000 familias de productores y vendedores en estos mercados.

Mañana viernes se votarán en el parlamento las reformas que no aceptan los vendedores de los mercadillos, que se colocarán ante el Parlamento para protestar y exigir una cita con el primer ministro Andonis Samarás y el vice presidente del gobierno Evánguelos Venizelos.  Y  el sábado volverá a haber un reparto gratuito de frutas y verduras, con los consiguientes empujones…

Lo que no dicen los vendedores es que a partir de ahora quien no esté al día  con el pago de sus  impuestos, incluyendo el IVA y con el pago de su cotización del seguro (como en el caso de todos los demás comerciantes griegos)  no podrá conservar su puesto ni vender en los distintos mercados. Los  puestos se conseguían hasta ahora por antigüedad, por enchufe puro y duro o gracias a  un “sobrecito” entregado a personas concretas. Las reformas están mejorando las infraestructuras griegas, pero muchos están perdiendo prebendas, privilegios, influencias y enchufes… teniendo que pagar mas impuestos y pasando a ser como el resto de los sufridos griegos.

 

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