José Manuel Otero Lastres el 04 nov, 2014 El 12 de febrero de este año escribí el Post titulado “El minuto de gloria de un ciudadano gris” sin saber entonces del señor Monedero otra cosa que su condición de profesor de la Universidad Complutense. Comentaba en aquel momento su increíble ocurrencia de pedir un tribunal popular para juzgar al “fascista Vargas Llosa”. Y añadía que solamente un fanático de la intransigencia era capaz de ver en los demás una condición de la que seguramente él estaba sobrado: ser un totalitario. Así habrían quedado las cosas de no ser porque el señor Monedero pertenece a Podemos y esta formación política, como es sabido, se presentó con notable éxito a las elecciones europeas y actualmente las encuestas le auguran un buen porcentaje de votos en las próximas elecciones a las que se presenten. De simple bocazas, el señor Monedero pasó, tras las elecciones, a ser líder un movimiento político que puede llegar a tener funciones de gobierno. Y no me parece inoportuno recodar que el número dos de Podemos piensa que ciertos ciudadanos de bien, como el Nobel Mario Vargas Llosa, deben sea juzgados por “fascistas” ante un tribunal popular. No puedo compararme, ni por asomo, a alguien con la trayectoria pública de Mario Vargas Llosa. Pero no me parece que mis ideas políticas sean muy diferentes a las de él. Razón por la cual, ahora, siento sobre mí la amenaza de que si algún día esa formación llega a gobernar podré llegar a ser juzgado por “fascista” por un tribunal popular. De ser así, lo importante en ese eventual momento no será lo que yo pueda alegar en mi propia defensa porque ya estaré prejuzgado por la soberana decisión del que mande. Otros temas Comentarios José Manuel Otero Lastres el 04 nov, 2014