El funeral laico o civil es el servicio funerario basado en la persona fallecida y en su esencia. Sin importar las creencias religiosas de los presentes, se hace una celebración sobre la vida del difunto. En este tipo de ceremonias se recuerda sus rasgos, virtudes, anécdotas, música….
En un funeral aconfesional los familiares son los que deciden cómo despedir a su ser querido sin que haya ninguna clase de servicio religioso. En estas ocasiones suele haber un maestro de ceremonias en las que, de acuerdo con la familia, dirige unas palabras de despedida en honor al fallecido y se hace alguna lectura de algún texto simbólico o algún poema.
1. Palabras de Apertura: Se da la bienvenida a los asistentes y se explica cómo se va a desenvolver la ceremonia.
2. Reflexiones sobre la Vida y la Muerte: se realizan lecturas de prosa o poesía sobre el tema de la muerte. También está permitido hacer alguna oración de cualquier índole religiosa, si así se solicita.
3. El Tributo: Esta es la parte del servicio donde familiares o amigos pueden dirigir unas palabras a los asistentes para recordar al difunto y hacer honor a su vida, sus logros, etc.
4. El Entierro: Es el momento de la sepultura del ataúd o transporte al crematorio, según sea el caso. Esta precedido por música o por unos minutos de silencio para hacer una reflexión o una oración en silencio.
5. Palabras Finales: se dicen unas palabras finales y se agradece a todos los asistentes por acompañar a la familia en la ceremonia.