Hace unos años, visitar Atenas era sinónimo de derrota para el Real Madrid. La potencia de Olympiacos y Panathinaikos era terreno vedado para los blancos, que a falta de saber rival en cuartos conocen ya que su destino será la capital griega.
El encuentro que los dos gigantes helenos disputarán en la última jornada del Top 16 decidirá el rival blanco en la antesala de la Final Four y por primera vez en años, no hay nervios ni preocupación. Al contrario. El Real Madrid será favorito con cualquiera de los dos y los que lo temen, los que quieren evitarlo, son rojiblancos y verdes. El Madrid es, junto al Barcelona, el coco del cruce. El equipo a evitar.
Así, la visita a Atenas no será tan dramática como antaño, aunque con matices. El actual campeón, verdugo del propio Real Madrid en la pasada Final Four, sería más complicado con Spanoulis al frente y, además, con el exmadridista Begic en sus filas. En el otro bando, el Panathinaikos, es Diamantidis el que lidera las operaciones en un equipo muy veterano al que le ha costado mucho clasificarse.
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