ABC
| Registro
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizABC
Blogs Jugar con Cabeza por Federico Marín Bellón

Carlsen, virtual campeón del mundo de ajedrez

Carlsen, virtual campeón del mundo de ajedrez
Federico Marín Bellón el

Magnus Carlsen es el nuevo campeón del mundo de ajedrez. Le falta hacer unas tablas en alguna de las tres partidas que restan oficialmente, con 6-3 en el marcador, pero es un mero trámite administrativo. No sorprendería que mañana mismo se firmara un empate sin demasiada lucha, que cerraría el duelo. En su último zarpazo, Anand se lanzó a la yugular del noruego, en una posición apasionante, pero sus reflejos ya no son los de antes. El indio tropezó, cometió un grave error y nos dejó sin ver lo que podría haber ocurrido en la partida más interesante de todo el Mudial. Es el fin de una era, aunque el futuro campeón prefirió esperar a corroborar esta afirmación: «Seamos correctos esta vez».

Por fin, con el agua al cuello, el campeón del mundo decidió ir a por su rival sin reservas, a muerte. Por primera vez en el Mundial se alcanzó una posición desequlibrada, de las que pueden dar auténtico espectáculo. En el tramo final, sin embargo, se pudo ver un síntoma de la falta de velocidad de este campeón, antes conocido como el Tigre de Madrás por su velocidad de juego. Él ya no es el mismo y su ciudad natal ahora se llama Chennai. Demasiados cambios para alguien que lo ha sido todo en el ajedrez, para el pentacampeón del mundo. Para su jugada número 23, Anand empleó 40 minutos. En ese tiempo, cuando era joven, jugaba tres o cuatro partidas clásicas. Fue un pequeño anticipo de la catástrofe que vino después, un simple error de cálculo que nos privó de un espectáculo que prometía ser grandioso, sobre el alambre de los apuros mutos de reloj.

Magnus Carlsen cumplió su papel. Se defendió con orden e incluso conservó siempre una microscópica ventaja, según el juicio preciso de las máquinas. El tipo de posición al que se había llegado, sin embargo, era justo uno en el que, a la hora de la verdad, sobre el tablero y sin asistentes de silicio, cuenta mucho más la inspiración personal y el estado de forma. Y eso fue lo que decidió. El viejo tigre dudó y Mozart terminó de amansarlo.

Ha nacido una nueva era en el mundo del ajedrez. Viva el nuevo rey, aunque él fuera prudente y prefiriera aplazar el juicio sobre los tiempos que se aproximan. Anand, por su parte, se comportó una vez más como un gran deportista y compartió con Magnus la rueda de prensa como si hubiera perdido una simple partida. «Rueda de prensa en Chennai. Solo un gran campeón como Vishy Anand es capaz de mantener la compostura como lo está haciendo: ¡genio y figura!», tuiteaba Miguel Illescas.

Ajedrez

Tags

Federico Marín Bellón el

Entradas más recientes