ABC
| Registro
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizABC
Blogs Madre no hay más que una por Gema Lendoiro

Parir según la OMS o by Pilar Rubio

Gema Lendoiro el

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

También es (mala) casualidad que, en la semana mundial del parto respetado, Pilar Rubio saque un libro hablando de sus embarazos y partos y cuente en televisión que se programó sus partos y sus razones (calendario de su chico), justamente las contrarias a lo que la OMS dice y que esta semana se recuerda con insistencia a nivel mundial para que los partos sean respetados. ¡Ni a propósito, oiga!

La entrevista de ayer, en mi opinión, fue muy desafortunada. Desde luego Pilar Rubio, como cualquier mujer, tiene derecho a elegir cómo quiere parir. Y si ella decidió parir mediante un parto inducido para que su chico, el futbolista Sergio Ramos, estuviera presente, habrá que respetar su decisión. El problema no está en su decisión que, imagino, habrá consensuado con su ginecóloga. En mi opinión el problema está en que diga ante tanta audiencia que se planificó el parto, que se lo indujeron y que obvie explicar qué consecuencias tiene hacer todo esto. Ninguna inofensiva, por cierto. 

De repente, en unos minutos, lo que ella dice llega a muchísimas más mujeres que interpretan que eso que ha hecho ella es lo normal y que no pasa nada. Cuando sí pasa. Ayer publiqué las recomendaciones de la OMS y del Ministerio de Sanidad aquí y lo vuelvo a recordar respecto a este punto. Partos inducidos. Tenemos una tasa de 19,4% cuando la OMS establece que en ninguna región del mundo debería superar el 10%. Por lo tanto, Pilar Rubio puede elegir cómo parir y puede contarlo en la tele, ¡faltaría más! pero es una irresponsabilidad dejar el mensaje a medias. Ella le comenta a Pablo Motos que su ginecóloga le propone dar a luz al día siguiente. Pilar, en sus dos embarazos, se programó el parto para que su chico pudiese estar delante. ¿Es una cuestión de peso? Seguramente no lo sea si lo vemos desde las necesidades fisiológicas de mamá y bebé. Lo que importa no es lo que ella haya hecho que, insisto, es su derecho, lo que importa es que lo cuente ante tantas personas sin explicar que:

  • ¿Cuándo está indicada la inducción? Cito en cursiva el texto de la matrona Gemma Méndez Pérez en una publicación de El parto es nuestro que si pinchas aquí la verás entera. Está indicada la inducción del parto cuando los beneficios de finalizar la gestación para la salud de la madre y del feto son mayores que los de permitir que el embarazo continúe.
    • Estados hipertensivos del embarazo (Tensión arterial muy alta) Preeclampsia, Eclampsia y Síndrome de HELLP cuando el estado materno o fetal se vean afectados y corran peligro, pero que permitan 48-72 horas de tiempo para  poder finalizar la gestación mediante una inducción. Esa demora va en función de los datos analíticos y ecográficos.
    • Rotura prematura de la bolsa amniótica. El 85% de las mujeres con RPM habrá dado a luz en las primeras 24h tras la rotura, un 10% lo hará en las siguientes 24h y el  5% lo hará  más tarde. Dependiendo del estado del cérvix se os ofrecerá esperar o inducir, si el índice de Bishop es mayor de 6 se puede esperar entre 12 y 24 horas a que evolucione el parto por sí mismo, pasadas esas horas se puede plantear la inducción. La SEGO también contempla la posibilidad de inducir en el momento de la rotura si las condiciones del cuello del útero son buenas (Bishop mayor que 6). Pero si el cérvix no es favorable no hay acuerdo por parte de la SEGO sobre qué actuación sería la adecuada, si dejar evolucionar con vigilancia durante 24-72 horas o realizar una  maduración- inducción a las 12-24 horas.  
    • Infección amniótica. (Infección amniótica y no “riesgo de infección”). El diagnóstico de coriamnionitis, infección de las membranas amnióticas por microorganismos, no es indicación inmediata de terminar la gestación si se prevé que el parto va a evolucionar, siempre que sea  bajo cobertura antibiótica y vigilancia fetal continua. No es, por tanto, indicación de cesárea urgente pero el parto debe terminarse en un máximo de 12 horas.
    • Sospecha de riesgo fetal:
      Antecedentes obstétricos desfavorables, repetidas muertes fetales anteparto en alguna semana determinada, ya que el riesgo de recurrencia puede estar aumentado dependiendo de la causa.

      • Crecimiento intrauterino retardado (CIR) confirmado.
      • Embarazo postérmino prolongado, más de 42 semanas. No hay un momento establecido para la realización de la inducción, se aconseja realizarla entre la 41 y 42 semanas de gestación, siempre teniendo en cuenta los signos de bienestar fetal y el estado del cérvix de la mujer. Si el feto muestra signos de bienestar y la mujer tiene un cérvix inmaduro se puede demorar la inducción hasta la semana 42, según la literatura médica.
      • Isoinmunización por incompatibilidad de rh sanguíneo entre la madre y el feto.
      • Complicaciones médicas graves: por ejemplo
    • Síndrome antifosfolípídico (SAF) es una enfermedad autoinmune que se presenta principalmente en mujeres jóvenes. Las personas con SAF fabrican proteínas anormales denominadas autoanticuerpos antifosfolípidos en la sangre. Esto hace que su sangre fluya de forma inadecuada y puede provocar la formación de coágulos peligrosos en venas y arterias, problemas para un feto en desarrollo y abortos espontáneos.
      • Diabetes mellitus tipo 1 descompensada o de difícil compensación.
      • Enfermedad renal crónica.
      • EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica).
    • Colestasis intrahepática del embarazo. Los ácidos biliares son eliminados de forma incompleta por el hígado de algunas gestantes, lo que aumenta sus concentraciones en sangre y líquido amniótico. Es una patología benigna para la gestante que se asocia con un incremento de la muerte fetal intraútero.
    • Muerte fetal intraútero, ya que existe riesgo de infección uterina con peligro para la madre.
    • Enfermedad fetal que necesita asistencia neonatal especializada, como por ejemplo un feto diagnosticado de hernia diafragmática de Bodalech.
    • Otros factores:
      • Distancia al hospital
      • Dilatación avanzada sin signos clínicos de comienzo de trabajo de parto.

Como habréis visto, ninguna indicación que se parezca mínimamente a “es que quiero que mi chico esté en Madrid” está recogida en ningún documento sanitario. Decir que a una le han inducido el parto y no explicar las consecuencias que eso conlleva me parece muy irresponsable por su parte. Doy por hecho que no lo hace a mala fe, que ella no pretende hacer ningún daño con ello pero debería hacer una mínima reflexión sobre las cosas que dice y el alcance e impacto que tienen. Ella misma explicó que cuando un periódico serio y de tirada nacional dice que “Pilar Rubio ha alquilado toda la planta para dar a luz” o “Pilar Rubio ha prohibido a las enfermeras que la miren a los ojos”, la gente se lo cree porque sale en las noticias. Pues bien, Pilar, cuando tú dices las cosas que dices sobre las inducciones de los partos, también muchas mujeres se creen que lo que tú has hecho es la norma y que no pasa nada porque, “fíjate tú si lo ha hecho la Rubio” Ahí radica la irresponsabilidad, no en que se lo haga ella, que ella sabrá, sino en que dé la impresión de que eso está bien. Sin más. Tirando por tierra toda la evidencia científica publicada sobre qué consecuencias tiene inducir los partos.

Cuando ella, de manera muy soslayada explica que la oxitocina es lo que te ponen para provocarte el parto, obvia del tirón que las mujeres tenemos una oxitocina natural que sale cuando se desencadena el parto y que tiene una función maravillosamente programada por la biología para hacer su cometido. Me parece una gran faena que la maravillosa oxitocina (la buena, no la copia, la sintética) quede relegada a tan vulgar lugar. La hormona responsable del amor relegada de una manera tan superficial y, tal y como explico en esta entrevista a la bióloga Irene García Perulero

«La oxitocina sintética que se administra en los partos no se produce en forma de pulsos, la principal diferencia es que no llega al cerebro materno, o llega en muy poca concentración, puesto que no atraviesa la barrera hematoencefálica (un sistema que protege a nuestro cerebro de sustancias nocivas). Y no sólo eso, sino que la introducción de oxitocina exógena en el proceso puede interrumpir la producción propia de oxitocina endógena».

«Por lo tanto, el parto así —explica— no sólo queda en manos de un aparente control externo, sino que en realidad el proceso se descontrola absolutamente desde el punto de vista neurológico. Y así, un proceso complejísimo que la naturaleza ha ido seleccionando durante los últimos 500 millones de años se deja en manos de una vía intravenosa y un medicamento y la mayor o menor prisa del ginecólogo de turno».

En una reflexión final la bióloga concluye con que «lo raro es que aún así podamos parir. Es más que probable que dentro de unos años nos demos cuenta de que introducir oxitocina sintética de forma rutinaria en los partos ha sido uno de los experimentos científicos sin control más peligrosos que ha realizado el ser humano»

Para quienes nos dedicamos desde nuestras profesiones, periodismo, sanitarios, abogados…a hacernos eco o a explicar hasta la saciedad a las mujeres que deben estar informadas y dar su consentimiento a las prácticas abusivas, esta entrevista es un jarrón de agua helada porque tira por tierra mucho trabajo.

Por no hablar de las cosas que dice sobre la lactancia. Decir que da igual que tomen pecho o biberón aunque “para mí fue una experiencia maravillosa darlo”,  que se crían igual, que da igual…y también tanto trabajo de tantos profesionales en este tema explicando que no, que no es lo mismo, que por supuesto lo que la madre decida habrá que respetarlo pero que lo mejor es la leche materna y que la OMS recomienda en exclusiva hasta los 6 meses y con alimentación complementaria hasta los dos años. Decir tan alegremente que da igual también me parece muy poco responsable.

Y así estamos con todo. Avanzamos unos pasos y, de repente un día en El Hormiguero Pilar Rubio, deshace lo andado. Y lo que es peor, sin cero evidencia científica que, comprendo, bajaría la audiencia pero que si ella hubiera querido, con gracia las cosas importantes y verdaderas también se pueden contar en la tele.

Del libro prefiero ni hablar. Ver su entrevista es más que suficiente para imaginar qué puede aportar al maravilloso mundo del embarazo y parto.

Me puedes seguir en facebook, en Twitter y en linkedin

apegoparto naturalSin categoríaviolencia obstétrica
Gema Lendoiro el

Entradas más recientes