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Caballos que salvan vidas. Así es la equinoterapia

Visitamos las instalaciones de Ecrin Terapias, empresa puntera en equinoterapia y neurorrehabilitación con caballos

Caballos que salvan vidas. Así es la equinoterapia
Alfonso M. Arce el

Las salas de cine son las culpables de numerosos estereotipos aceptados sin rechistar por casi todos. Si pensamos en caballos pronto vendrá a nuestra mente la imagen de un niño atormentado, o la de un jinete con una conexión casi espiritual con su montura; historias en las que a duras penas se pueden retener las lágrimas cuando aparecen los créditos finales. Aunque los vínculos entre animales y humanos proporcionan a diario anécdotas de lo más increíbles, hay un lado más desconocido de las terapias con caballos o yeguas en las que los protagonistas son adultos que sufren enfermedades degenerativas, o han tenido alguna lesión y para quienes la equinoterapia supone una gran ayuda. Para explicarnos en qué consiste hemos contactado con Natalia Otero, directora de Ecrin Terapias, empresa especialista y pionera en este tipo de tratamientos. Esto es lo que nos contó:

A.M.Arce: Natalia, esto de empezar a tratar a alguien utilizando un caballo supongo que no nace de la noche a la mañana ¿se conocen sus orígenes?

Natalia Otero: La primera referencia existente data de 1917, año en el que el fisioterapeuta Olive Sands llevó sus caballos al Hospital de Oxford para colaborar en la rehabilitación de los soldados tullidos en la 1º Guerra Mundial. El programa de rehabilitación obtuvo tan buenos resultados, que se creó el primer grupo de equinoterapia de dicho hospital. Aunque si tenemos que hablar de un antes y un después, sería lo ocurrido con Lis Hartel en 1952, quien padeciendo poliomelitis consiguió junto a su fisioterapeuta ganar puestos importantes en Doma Clásica. A partir de aquí, comenzaron los estudios y la creación de centros en Europa, EEUU y Canadá.

A.M.Arce: ¿Hay algún país que se pueda considerar a la cabeza de esta actividad?

Natalia Otero: Es difícil responder a esta pregunta porque no hay un consenso nacional ni internacional. Los países con más experiencia en equinoterapia no están cualificados en carreras sanitarias; los países donde más se hacen estudios, no hacen clínica; y luego hay países como España, Alemania, Holanda, EEUU en los que hay un poco de todo. A esto hay que añadir que actualmente no hay un reglamento que unifique la equinoterapia, ni una Ley que vele por parar el intrusismo y fomentar la equidad.

Lucía, paciente de Ecrin Terapias: “Los caballos son muy buenos coterapeutas, en mi caso, han sido imprescindibles en dinámicas de autoconfianza, seguridad en uno mismo y autoestima”

A.M.Arce: Hablando ya de España ¿Cuántos sois? ¿Cómo estáis organizados?

Natalia Otero: En España cada vez hay más centros ‘reglados’ en el sentido de que son profesionales del ámbito de la salud los que hacen las intervenciones, que es lo correcto porque es una terapia, aunque sea con caballos. Empresas específicas de neurorrehabilitación con caballos solo estamos nosotros, Ecrin Terapias, el resto son asociaciones o fundaciones y principalmente hay en Andalucia, Comunidad de Madrid, Galicia, Comunidad Valenciana y Extremadura.

A.M.Arce: ¿Qué perfil tenéis los profesionales que os dedicáis a este tipo de terapias?

Natalia Otero: Deben ser terapeutas, es decir, personal con carreras de fisioterapia, logopedia, psicología y terapia ocupacional, además especializados en daño cerebral y en terapias asistidas con caballos. Es importante recordar que esta terapia es complementaria, es decir, no debe sustituir a la terapia básica en hospital, centro de atención temprana o el sitio especializado al que asista el paciente, porque nosotros no podemos abarbar algunos aspectos que se trabajan en camilla o sala, por ejemplo. Todas las terapias suman y se complementan, pero la terapia base debe ser terreno del paciente.

A.M.Arce: Además de los profesionales, supongo que el animal tiene que tener unas características muy concretas, que no todos los caballos valen para este tipo de terapias ¿es así?

Natalia Otero: La selección depende del tipo de intervenciones a las que se vaya a enfocar el centro. Si es para trabajar con afectación más cognitiva/emocional/conductual, tiene que ser un caballo que tolere las emociones y no se contagie de ellas. Si es para trabajar a nivel motor, tiene que ser un caballo grande, con un buen dorso, y buena musculatura. En ambos casos, es importante decir que no valen caballos con lesiones o muy mayores. En cuanto a rasgos comunes del caballo, tiene que tener cierta capacidad de adaptación y no ser muy reactivo a estímulos externos, que no sea asustadizo. Además de las características propias del animal, por supuesto son caballos que se entrenan para ello tras la selección, buscamos mejorar su estado muscular para permitir la monta de manera segura y en irle desensibilizando a estímulos relacionados con las terapias como las rampas u otros accesos, la propia hípica, el resto de caballos, juguetes, etc. Esta parte es parecida al entrenamiento que puede recibir un perro guía para hacernos una idea.

A.M.Arce: ¿Hay caballos ‘especialistas’?

Natalia Otero: Sí por supuesto, hay caballos que tienen una sensibilidad especial para las terapias y aunque sorprenda puede que en su pasado fueran caballos que dieran guerra  a sus dueños y ahora son muy previsibles y están felices haciendo lo que hacen. Nosotros contamos con cinco ejemplares cada uno con sus cualidades:

  • Mister. Fue mi primer caballo de terapia. Era un caballo de competición de salto, un súper deportista y me lo regalaron porque ya no podía seguir competiendo. Desde que empezó a hacer terapia, fue muy especial con los niños y ver como se acercaba a sus sillas de ruedas era mágico (lo utilizábamos para montas gemelas con niños pequeños). Aunque lo hemos jubilado hace 1 mes por tener un soplo en el corazón, siempre estará con nosotros.
  • Telma. Es la más mayor pero la más enérgica. Costó mucho entrenarla para terapia porque era muy nerviosa y testaruda pero a día de hoy es las más segura de todos los caballos que tenemos. Eso sí, es incansable jajaja.
  • Oreo. Es un caballo muy especial, en terapia es buenísimo y es el que mejor aguanta la gestión emocional, pero cuando le montamos nosotras para trabajarle o cuando vamos de paseo por el campo de repente quiere correr sin parar.
  • Baloo. Lleva poco con nosotros, pero es el más cariñoso y suave de todos. Es muy miedoso del resto de caballos, le gusta más estar con personas.
  • Aslan. Llegó a mediados de diciembre y es un caballo muy grande. Queríamos buscar un buen sustituto de Mister, que también es muy grande. Aunque impresiona verlo, todo lo que tiene de grande lo tiene de bueno.

A.M.Arce. Cuando hablamos de intervenciones y más concretamente en adultos ¿de qué tipo de problemas estaríamos hablando?

Natalia Otero. En adultos trabajamos con pacientes con todo tipo de afectaciones: sin control cefálico, sin control de tronco, con amputaciones, lesiones medulares, esclerosis, etc. Adaptamos la intervención al punto de control motor y funcionalidad que tenga cada uno. También puede haber terapias mucho más relacionadas con el ámbito psicológico.

Dentro de la equinoterapia para adultos tenemos tres tipos de intervenciones: la equitación terapéutica que es para aquellas personas que quieren empezar a hacer el deporte en sí de la equitación pero con adaptaciones e incluyendo algunos de los objetivos que estemos buscando, bien desde el área de la psicología o desde la fisioterapia. Sería una unión de la equitación y de estos objetivos concretos. Para hacer esta modalidad tiene que haber cierta autonomía, tanto física como psicológica. Por otro lado tendríamos la hipoterapia, que está basada en los principios neurofisiológicos del control motor pero encima del caballo, algo que contribuye a que se trabaje de manera más natural y diversa todo lo relacionado con el sistema del equilibrio. Con la hipoterapia buscamos mejorar la funcionalidad y la calidad de movimiento según las necesidades de la persona en un entorno más espontáneo.

María, paciente de Ecrin Terapias con esclerosis múltiple: “Empecé a hacer hipoterapia sin saber muy bien que esperar. Después de un año me atreví con la equitación adaptada. Sentir que dirijo al caballo es maravilloso, siento como si mis piernas fueran capaces de andar correctamente de nuevo. El caballo consigue que haga ejercicio, que esté en contacto con la naturaleza, que mejore mi autoestima, eso además de los ratos divertidos con los terapeutas que siempre tienen ganas de echarse unas risas”

Salvo que el paciente tenga sobrepeso, al principio empezamos sin montura, para  que haya mayor información del caballo a la pelvis y nos centramos en trabajar el control del centro de gravedad y la línea media, muchos pacientes lo tienen alterado y esto les impide poder caminar con seguridad y tener que hacer muchas compensaciones para solventarlo. Este trabajo favorecerá la estabilidad y disociación de la cinturas escapular y cintura pélvica, así como el punto de unión de ello, el famoso core que comprende toda la zona de la faja lumbopélvica.

Igor, paciente con amputación completa de una pierna: “El equipo de ecrin ha sido clave en esta etapa de mi vida para acercarme al caballo, para tener más confianza en mis propias capacidades y para sentirme libre en un entorno natural”

Desde ese punto de partida,  vamos trabajando el sistema del equilibrio, el propioceptivo, el vestibular y el visual, con ejercicios específicos y diferentes ritmos en el caballo y tipos de suelo. Por ejemplo, si la pista es más dura o más blanda, generará más inestabilidad y por lo tanto el paciente tiene que haciendo ajustes posturales. Además añadimos aros de pilates, pesas, theraband para dar información sensorial a los pacientes que no sienten alguna parte de su cuerpo o que les cuesta tener referencias y también usamos estribos. Las sesiones van en progresión pero siempre tienen objetivos funcionales. Nuestra experiencia nos dice que los pacientes notan grandes cambios al mes, a nivel físico sobre todo una mejora de la estabilidad y del equilibrio y mayor tono abdominal; a nivel psicológico se crea un vínculo muy fuerte que favorece el ir venciendo problemas de autoestima, gestión emocional, miedos, etc.

A.M.Arce. Doy por hecho que este tipo de terapias no están cubiertas por la seguridad social ni por seguros privados ¿Es caro?

Natalia Otero. Nosotros somos una empresa para lo bueno y para lo malo. Como puntos fuertes tenemos a nuestros profesionales, todos están contratados y formados por nuestro método, todos tienen un alto nivel de equitación y por supuesto son sanitarios. Además contamos con los caballos que son nuestros y están entrenados por nosotras y nos encargamos de ellos nosotras. También hay que destacar que nuestras instalaciones permiten realizar la intervención sea cual fuere el clima. Por todo ello, nuestras tarifas no son las de una asociación y es más caro, pero en proporción a lo que cuesta una sesión de fisioterapia en sala es incluso barato sobre todo teniendo en cuenta que el precio incluye un caballo y dos profesionales.

Juan Ramón, paciente de Ecrin Terapias: “La mezcla entre buenos y amables terapeutas, buenos y dóciles caballos y pura naturaleza, y todo aderezado con cariño y ganas de ayudar, es un cóctel muy saludable para el cuerpo y para el alma”
Natalia acompañando a Blanca

A.M.Arce. Supongo que a lo largo de todo este tiempo tendrás numerosas historias personales dignas de mención ¿Nos podrías contar alguna?

Natalia Otero. Muchísimas y me costaría elegir entre todas ellas, pero ahora mismo la primera que se me viene a la mente es un caso triste porque la paciente falleció pero fue una experiencia humana preciosa. Se trata de Blanca Morell que tenía veintitrés años cuando empezó a acudir a equinoterapia en Ecrin debido a un cáncer que le causó una pérdida de la movilidad y sensibilidad de cintura para abajo. Ella pensaba que la terapia con caballos sería muy útil como parte de su tratamiento de fisioterapia, y especialmente le ayudó a mejorar su postura, pero sobre todo fue una experiencia muy positiva a nivel emocional. Todos comprobamos que la equinoterapia tiene unos efectos muy beneficiosos no solo a nivel físico sino también para la salud mental. Siempre recordaremos con muchísima alegría las sesiones que teníamos con ella y en su memoria organizamos unas jornadas para ayudar a niños con autismo severo. Su familia también se ha involucrado en la ayuda a la investigación y apoyo a otros pacientes que sufren cánceres tan agresivos como el de ella y han creado la fundación que lleva su nombre: Fundación Blanca Morell.

Jacobo, paciente con esclerosis múltiple: “La mejora de coordinación y movimiento que te crea el caballo, no puede compararse a otro tipo de terapias más estáticas. Es el caballo el que hace que te muevas por instinto y que consigas con la ayuda de los fisioterapeutas algunos movimientos que pensabas que no lograrías hacer nunca más”

También puedo contaros los ejemplos de Jacobo y María, ambos con esclerosis múltiple que han logrado grandes mejoras de coordinación gracias a la interacción con los caballos, o el caso de Begoña que empezó sus sesiones en Ecrin por problemas de conducta y físicos, ella nunca había montado a caballo y el primer día que lo hizo le salió como si fuera lo más normal del mundo, ahora está deseando que llegue el sábado para venir a disfrutar con su sesión. Son muchísimas las historias y los vínculos que se crean entre caballos, terapeutas y pacientes. Es muy difícil elegir unas frente a otras.

Las relaciones humanas con los animales son y serán siempre un misterio, puede considerarse una de las pocas cosas que todavía nos haga creer que un mundo mejor es posible. Si a esto le unimos la dirección y el ánimo de un equipo de profesionales entregados en cuerpo y alma a sus pacientes, los resultados son espectaculares. Si tienes interés en saber más de Ecrin Terapias puedes visitar su web www.ecrinterapias.com o escribirles a ecrinterapias@gmail.com. Desde ABC Bienestar solo nos queda desear a Natalia y su equipo que continúen con su labor y que la fuerza las acompañe.

Begoña y Natalia enviando un saludo a todos los lectores de ABC Bienestar
Salud

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