Lo publica la revista “Archives of Disease in Childhood”, pero cualquier madre o padre pueden dar fe de cómo los más pequeños se manejan con el móvil o la tablet. A los dos años, ya saben manejar las pantalla táctiles y casi son expertos. Incluso se las ingenian para hacer alguna trastada que luego cuesta deshacer. Parece increíble que sus pequeños deditos logren navegar menú tras menú para poner y quitar complementos. Por su puesto, a esa edad no saben la que pueden estar liando en el móvil de mamá o papá… Para ellos es simplemente un juego más.
Los bebés de ahora son digitales y parecen “expertos en el uso de pantallas táctiles. Pueden deslizar, desbloquear y buscar activamente características en los teléfonos inteligentes y las tabletas, según constata este pequeño estudio. Este nivel de interactividad es similar al juego, destacan los investigadores, que sugieren que la tecnología podría tener un uso potencial en la evaluación del desarrollo de los pequeños.
Expertos en pantallas táctiles
Basan sus conclusiones en 82 cuestionarios sobre el acceso a la pantalla táctil y su uso, completado por los padres de niños de entre 12 meses y 3 años. Se pidió a los padres que indicaran el tiempo que su hijo utiliza pantallas táctiles cada día, y si es capaz de desbloquear la pantalla, deslizar el dedo a través de páginas o imágenes y reconocer e interactuar con iconos de aplicaciones para juegos. También se preguntó a los padres si habían descargado algún juego o aplicaciones específicamente para el uso de sus hijos.
La mayoría de los padres (82%, 67) tenían un dispositivo de pantalla táctil: teléfono inteligente o tableta. De éstos, la mayoría (87%, 58) se lo daba a su hijo para jugar durante una media de 15 minutos al día. Y casi dos tercios (62%) dijeron que habían descargado aplicaciones para su hijo a usar.
Nueve de cada 10 (91%) padres dijeron que su hijo era capaz de pasar el dedo; la mitad (50%) dijeron que los pequeños eran capaces de desbloquear la pantalla, y casi dos tercios (64%) consideró que su hijo buscaba activamente las opciones de la pantalla táctil.
La edad promedio de los niños pequeños con capacidad para realizar estas tres habilidades fue de 24 meses, mientras que el promedio de edad para identificar y utilizar las funciones de pantalla táctil específica fue de 25 meses. Casi tres de cada cuatro padres (72%) creían que su hijo fue capaz hacerlo.
En general, uno de cada tres de los niños pequeños podía realizar las cuatro habilidades hacia los 29 meses, como media, e incluso los niños de 12 meses utilizan regularmente pantallas táctiles.
Los consejos cambian
En 1999 la Academia Americana de Pediatría recomendó que no se animara a los niños menores de dos años a utilizar pantallas, por considerar que suponían una exposición a material inadecuado que suponían un riesgo de dejar de lado otras interacciones importantes para su desarrollo y para el juego. Este último es esencial para el correcto desarrollo de los pequeños. De hecho todos los niños juegan, incluso en circunstancias muy adversas, una característica que comparten todos los mamíferos.
Para justificar estos recelos, los investigadores apuntan que estas recomendaciones fueron hechas antes de la llegada masiva de las pantalla táctiles, que pueden tener un impacto diferente en los cerebros en desarrollo de los niños pequeños. “Las aplicaciones de pantalla táctil interactiva ofrecen un nivel de compromiso no experimentado previamente con otras formas de medios de comunicación y son más afines a juego tradicional”, destacan. “Esto abre una aplicación potencial de estos dispositivos tanto para la evaluación del desarrollo como la intervención temprana en niños de alto riesgo”.
Sin embargo, advierten que “hay muchas aplicaciones diseñadas para bebés y niños pequeños, pero no existe una regulación de su calidad, valor educativo o su seguridad. Y algunos de los problemas que surgen con la observación pasiva de la televisión pueden extrapolarse también a este uso”.
Este vídeo refleja muy bien cómo ven el mundo digital los más pequeños: para una niña de 1 año, una revista es un iPad que no funciona
