La Navidad para los supermercados empieza el mismo día que deja de hacer un calor agobiante. Ese mismo día, los polvorones y mantecados ocupan las vitrinas decoradas con estrellitas, intentando contagiar un espíritu navideño que nadie siente en octubre.
En el mundo de la publicidad es exactamente igual. No sé el porqué, la verdad. Supongo que pensarán que con el dineral que están invirtiendo en un spot no lo van a emitir solo a finales de diciembre. Y ahí están ya, en octubre, usando imágenes de archivo de Santa Claus porque él ahora mismo debe andar en cualquier chalet de Benidorm. Y nosotros no podemos hacer nada: Los van a emitir.
Hoy he visto el primero… Y lo reconozco: Por poco muero de amor.
El spot de John Lewis me ha llegado.
De repente, he sentido por un momento que sí estábamos ya impregnados de ese sentimiento de ilusión y cariño que se vive en Navidad, cerca de las personas que más quieres. ¡Espero que os guste tanto como a mí! Y antes, os tengo que pedir un favor enorme que solo os llevará un microsegundo… ¿Me ayudarías a ser el blog del año de ABC? Solo se tarda un segundo en votar Un anuncio y Volvemos aquí, y te lo agradeceré de corazón. ¡Gracias!
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