Cuando Cristiano no quiso saludar a Del Bosque, campeón del mundo y de Europa, a tres metros de él
Cristiano Ronaldo ha demostrado una vez más ese egoísmo primitivo que asola su cabeza desde pequeño. Este niño, este hombre, esta estrella, siempre ha pensado que el único jugador importante en un campo es él. Cuando las Copas de Europa…