Compañero de fatigas, de ilusiones y de éxito junto a Luis Beneyto y Santisteban, Antonio Ruiz sigue vivito y coleando, presionando a los rivales para robar el balón y dárselo a Kopa para que centre y remate Di Stéfano, si es que Pancho Puskas no se ha anticipado y ha marcado el gol antes, mientras Gento espera a la siguiente jugada para ser él quien mande el pase de la muerte.
Antonio Ruiz llego al Real Madrid desde las bases de la cantera junto a Luis Beneyto y junto a Santisteban. Tiene 81 años como Luis Beneyto y los dos están tan fuertes como hace 60 años.
Ver a Luis trabajar con sus vinos del Marqués de Riscal y reunirse para hablar del Real Madrid que tan bien conoce es un ejemplo de trabajo, de ilusión y de fuerza. Cuándo Florentino Pérez ve a Luis Beneyto le dice “el hombre de los vinos”. Luis fue el madridista que convenció a todos los directivos y hombres influyentes del Real Madrid en 1978 para que, cuando Santiago Bernabéu murió, no hubiera elecciones y se eligiera un presidente de consenso. Le costó, les costó convencer a Luis de Carlos, pero al final admitió y fue el presidente que sucedió a Don Santiago.
Su amigo Antonio Ruiz fue, es, en su vida lo mismo que en su fútbol: todo lucha y fuerza. El murciano es un espejo para todos. Los dos, Luis y Antonio, tienen 81 años y es envidiable cómo están. Juan Santisteban, el otro compañero del alma, dice que aquellas Copas de Europa de la leyenda son casi irrepetibles y hoy hay un plantel que quiere emularles.
Antonio Ruiz ganó cuatro Copas de Europa y fue el mediocampista que mordía a los adversarios para recuperar el balón y que los grandes delanteros del conjunto blanco escribieran con sus goles la historia que en realidad era de todos. Antonio espera robar otro balón para dar el centro a Joseíto y que Rial lo remate con su zurda. Antonio, tus cuatro Copas de Europa están muy vivas. Como tú. Juan Santisteban y Luis Beneyto lo refrendan.
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