CEO es, en el mundo de la empresa esnob, el acróstico en inglés que significa Chief Executive Officer. Pero ya teníamos una palabra para eso. La secretaria del máximo ejecutivo de una aseguradora nos dice, en la radio, que él es el CEO. No sin cierta malicia preguntamos qué significa eso y él mismo nos contesta que es “lo que en español llamaríamos consejero delegado”.
Exacto.
La pregunta es: ¿no estábamos hablando en español? Cuando más preparado está el redactor, menos lo deslumbran los extranjerismos.
Hoy mismo he leído en el periódico que un tipo hacía coach surfing y al final ha resultado que viajaba de gorra. Mucho más frecuente es eso de estar en stand by. Lo correcto es estar en espera, por supuesto, pero algunas personas con el cerebro reblandecido por el sol se están cambiando de lengua porque la jerga híbrida mola más. A veces parece que el inglés se está convirtiendo en el idioma oficial de aquí.
Podríamos denominar “anglicismo” al necesario y “anglicismo idiota” al que no hace falta porque existe palabra española para cubrir ese significado. Vocablo que, cuando el barbarismo arraiga, por supuesto desaparece. En el caso del penúltimo anglicismo, fan zone, podríamos decir zona hincha, como me propone Javier Gálvez. El problema es que eso se entiende.
Dedicado a @juradololi
Más vida en @rafaelcerro
AnglicismoLenguaje Español