Pues sÃ, señores, ya no queda nada, y el horizonte de un pacto de gobierno, o coalición, o como lo quieran llamar, entre PSOE y Podemos es cada vez más negro.
El lunes empieza de verdad el curso polÃtico, aunque este año el presidente del Gobierno en funciones no deberÃa haberse cogido vacaciones, porque ha suspendido en todos los frentes. Sobre todo en uno, el más importante, la investidura, tras cuatro meses de bloqueo polÃtico.
Solo quedan 23 dÃas para que Pedro Sánchez negocie con los posibles socios de gobierno, se celebre la ronda de consultas del Rey y tenga lugar el debate de investidura. En circunstancias normales, una eternidad, porque un dÃa en polÃtica da para mucho. Pero en este caso la realidad es otra, al PSOE no le interesa nada el acuerdo porque las encuestas le dicen que si deja morir la negociación y vamos a elecciones, su resultado será mejor.
Y ha encontrado un aliado torpe y soberbio: Pablo Iglesias. Que rechazó una vicepresidencia y tres ministerios, tirando por la borda una oportunidad, quizás la última, para pisar moqueta.
Pues con este escenario, ya me dirán ustedes que es lo que nos espera. conociendo ya que a Pedro Sánchez lo único que le importa es el poder por el poder. Ni España, ni la estabilidad económica, ni la asfixia de las comunidades autónomas al negarle el dinero que le tiene que transferir, ni el prestigio internacional de un paÃs con un Gobierno en funciones.
Yo me temo que la única salida va a ser volver a las urnas, salvo humillación de Pablo Iglesias, que puede ser, ya que el futuro es mucho peor, una nueva sangrÃa de votos y escaños que lo dejen aún más débil y al borde de la desaparición.
Seguir a Paloma Cervilla en Twitter.
España