Si hay una ocasión en la que los Príncipes de Asturias pueden compartir unas horas, de tú a tú, con los periodistas parlamentarios, esa es el acto de entrega de los Premios Luis Carandell al "Cronista senatorial" y al "Cronista parlamentario", que se celebrada cada año en el Senado. En esta edición, los galardonados han sido la periodista de Europa Press, María José Artuch, y el programa "Parlamento" de TVE, respectivamente.
Si el acto es ya de por sí una ocasión para colocar en el escaparate a esta institución parlamentaria, tan olvidada en los medios de comunicación, lo relevante del día de hoy ha sido el discurso que ha pronunciado el presidente del Senado, Javier Rojo. Un auténtico rapapolvo, creo que no demasiado justo, a los medios de comunicación. En su alocución ha arremetido contra la crítica "injusta" que él considera que los medios hacen del trabajo de los políticos y no ha dudado en reconocer que le "inquietan" la "proliferación de tertulias políticas y de foros de debate político-periodistas en los que de la crítica se salta al insulto".
Este duro discurso ha sido muy comentado en el café que se ofrece después del almuerzo en la biblioteca del Senado. Los medios de comunicación tenemos nuestros defectos y muchas virtudes, pero no nos merecemos esta crítica tan dura, justo en el momento en el que los políticos no están dando un buen ejemplo del uso del dinero público.
España
