Años de decepciones, rumores de traspaso y problemas fÃsicos. Un calvario que Pau Gasol ha atravesado desde que ganó el anillo en 2010 y que acaba con su fichaje por los Bulls este verano. Nueva etapa en una de las franquicias mÃticas de la NBA, ¿pero con opciones reales de ganar el anillo?Â
La respuesta (al menos, MI respuesta) es que sÃ. Por supuesto. Los Bulls son inequÃvocamente uno de los grandes favoritos para hacerse con el anillo de campeón en un año en el que solo los Spurs (por trayectoria) y los Cavaliers (por potencial) podrÃan situarse por encima de ellos.
El favoritismo de los Bulls está supeditado a que Rose recupere el nivel de antes de la operación de la rodilla. El base es la gran estrella del equipo y el hombre que les debe liderar en la cancha. Michael Jordan, el sanctasanctórum de los Bulls, aseguraba en 2011, cuando Rose fue elegido el MVP más joven de la NBA, que con él se podÃa recuperar la gloria para la franquicia de Chicago. Una profecÃa que puede hacerse realidad esta misma temporada.
Los Bulls son un equipo compensado, que cuenta con buenos jugadores en todas las posiciones. Empezando por Rose, uno de los mejores bases de la liga, y acabando en Noah y Pau Gasol, dos pÃvots formidables que pueden complementarse muy bien. Por fuera son algo más débiles tras la marcha de Luol Deng, aunque hombres como Jimmy Butler, Mike Dunleavy o el rookie Doug McDermott pueden cumplir con creces ese rol anotador. En este último se tienen muchas esperanzas, pero habrá que ver cómo responde su muñeca en este primer año de competición en la NBA.
La misma incertidumbre rodea a Nikola Mirotic, al que después de pasearse por Europa con el Real Madrid le llega la hora de la verdad. Tendrá la presión de dar minutos de descanso a los hombres altos y, en ocasiones, jugará también en el perÃmetro por necesidades del guión, ya que Taj Gibson demostró el año pasado que puede ser un sexto hombre perfecto en la zona de los Bulls.
Al frente de esos mimbres estará Tom Thibodeau, un entrenador obsesionado con la defensa, que al mismo tiempo sabe dejar libertad al talento de sus jugadores en ataque. El técnico ha sido clave en la decisión de Pau para fichar por los Bulls y el español quiere devolver esa confianza en forma de canastas. Como ha reconocido en los últimos dÃas, se encuentra mejor que nunca. Más joven. Con más ganas. Sabe que es su última oportunidad para ganar un anillo y no quiere desaprovecharla. Puede que no sean los favoritos, pero estos Bulls tienen más hambre que muchos otros conjuntos aspirantes al tÃtulo y, si les respetan las lesiones, los Cavaliers, los Spurs y compañÃa tienen un problema.
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