El Real Madrid acumula cuatro derrotas en el último mes. Dos en la ACB (las mismas que sumó en toda la liga regular el año pasado) y dos más en Euroliga, lejos de la imbatibilidad que evidenció en la primera fase de la competición europea del curso anterior.
Una crisis de resultados que llega, además, sin que el equipo de Pablo Laso se haya enfrentado aún a ningún rival que de verdad vaya a luchar con ellos por los títulos. En España, aún no se ha visto las caras con el Barcelona (al que derrotó eso sí en la Supercopa) y en Europa su principal escollo ha sido el Efes, buen equipo, pero lejos de los aspirantes al título.
La impoluta temporada pasada “solo” le sirvió al Real Madrid para levantar la Copa del Rey, lo que permite hacerse una idea de la importancia real (poca o muy poca) que tienen las victorias en la fase regular de la ACB y de la Euroliga. Con ese panorama, los de Laso puede que hayan levantado un poco el pie, pero aún así hay algunos aspectos que explican este bajón de efectividad, que no será tal a la hora de la verdad.
- Renovación de casi la mitad de la plantilla: La marcha de Mirotic y la derrota en la final ACB dejó muy tocados a varios jugadores, lo que obligó a hacer más cambios de los habituales en los últimos años. Hasta cinco jugadores han llegado por primera vez al vestuario del Real Madrid y la mayoría de ellos para cumplir un rol importante. Eso obliga a cumplir con un período de transición que, en alguno de ellos, aún no se ha completado. Nocioni, Ayón o Maciulis están aún lejos de su mejor nivel físico y de química con sus compañeros, pero no hay dudas de que serán importantes a lo largo del año. Calidad no les falta.
- Lesiones inoportunas: Rudy Fernández, Sergio Rodríguez, Felipe Reyes, Ayón, Nocioni, Campazzo, Bourousis… todos ellos han sufrido algún percance físico esta temporada, lo que les ha impedido rendir con normalidad. Pequeños problemas que el año pasado se acumularon sobre todo al final de la campaña, lo que hizo mucho daño al equipo blanco en el tramo importante.
- Cambio en la estructura técnica: la salida de los ayudantes de Pablo Laso y la llegada de Chus Mateo y Zan Tabak obliga también a ajustar piezas en ese sentido. Los jugadores deben conocerlos y Laso debe aprender a escucharles.
- La relajación defensiva: El Real Madrid sigue siendo el equipo más efectivo de cara al aro, pero su defensa es la quinta peor de la ACB (77.64 puntos encajados por partido). Esta cifra contrasta mucho con los poco más de 72 que encajaba la temporada pasada. Cinco puntos que marcan una diferencia brutal.
- Las rotaciones: tienen su origen en el bajón físico del final de la pasada temporada, pero han lastrado el rendimiento en el inicio de esta. Si en 2013/14 había cuatro jugadores por encima de los 24 minutos de media por partido, en este solo Llull supera esa cifra. Además, el cinco inicial del curso pasado fue el 90 por ciento de las veces el mismo (Llull, Darden, Rudy, Mirotic y Bourousis) mientras que ahora apenas se ha repetido, en una búsqueda por sorprender al rival y aliviar de esfuerzos a la plantilla, algo que ha repercutido negativamente en la cohesión sobre la cancha.
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