Con un movimiento de la puerta corredera, quedaría visible el bar-libreria (espacio 3), lo más adecuado si acuden invitados o se organza cena en casa.
El muro corredizo se puede mover manualmente a través de un rail, o mecánicamente a través de un motor.
Aparece un espacio que sirve como dormitorio (espacio 4) al bajar una cama empotrada. Tras ella, se encuentra el armario para la ropa.
Como la televisión gira 180 grados, se puede orientar para visión desde la cama. Al levantar el panel de la cama, que incluye mesillas y estanterías, queda al uso el armario de la ropa, creándose una zona de vestidor (espacio 5).
Frente al vestidor se encuentra una mesa donde cenan cuatro. El baño, independiente, se sitúa al lado.
Para aligerar y agrandar los espacios, se usa el blanco, las luces discretas y una falsa iluminación en las ventanas, que dan a un patio interior.