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Blogs Laboratorio de Estilo por María Luisa Funes

La Mesa de Fin de Año

10 Claves para acertar y estar al día en todos los pasos del montaje

La Mesa de Fin de Año
María Luisa Funes el

No hay cena de fin de año que se precie sin música de fondo. Desde los clásicos de Haendel o Bach, hasta las canciones de Navidad de grandes tenores o los tradicionales villancicos, todas las opciones son buenas si se ponen a un volumen discreto. El olor, la luz y la decoración servirán de telón de fondo de una mesa familiar en la que debe presidir el buen humor.

 

  1. Ambiente y Decoración

La Navidad y el fin de año  en el Hemisferio Norte invita a la reunión, al abrigo y la chimenea. Añadir mantas y cojines en el salón, poner leña a la zona de la chimenea o perfumar los espacios con velas de olor y ambientadores amaderados o de aromas como la vainilla, la canela y la naranja, son recursos sencillos para convertir cualquier salón o comedor en un espacio más acogedor. El Nacimiento, que puede ser antiguo, nuevo, de miniaturas e incluso de clics de Famobil, es imprescindible y debe presidir alguna sala. (Foto Zara Home)

2. Luces

Las tiras de luces Led de bajo consumo y a buen precio iluminan cualquier espacio: la entrada, el salón, el comedor, alguna sala, la cancela de una casa o las ventanas que dan a la calle, tal y como suelen hacer en los países nórdicos. Dan el toque misterioso y cálido que evoca al sentimiento general de estas fechas tan señaladas.

3. Vajillas

Nada como estrenar una vajilla hecha “a medida”, con colores, imágenes, flores o dibujos representativos que tengan algo que ver con las aficiones de la familia o el lugar de reunión. Actualmente existen estupendas alternativas para encargarlas, como Patt Porcelaine (www.pattporcelaine.com) o Andrea Zarraluqui (@azarraluqui). De lo contrario, merece la pena sacar alguna vajilla antigua o heredada, con todos sus elementos y recipientes. ¿Qué mejor ocasión?

4. Cristalería

Las marcas de moda low cost se adentran cada vez más en el sector de la decoración y proponen una gran variedad de elementos delicados y a buen precio. En H&M y Zara Home se puede escoger entre una estupenda selección de copas y vasos, no solo de distintos tamaños y formas, sino también en distintos colores. Triunfan el cristal rosado y las copas retro. En la actualidad se lleva combinar piezas de cristalería de distinto tono. (Foto H&M)

5. Cubertería

Se vuelven a poner de moda los cubiertos de plata de las abuelas, con su infinidad de piezas curiosas, como las cucharitas de moka, los cubiertos de servir de marfil o los cuchillos para la mantequilla de pala curvada. Casi cualquier tienda de menaje ofrece  cuberterías con puños de resina o en esmalte de colores, con mangos de metacrilato o pasta que imita al marfil, fácilmente combinables con bajoplatos, vajillas y  manteles. (Foto: Manolo Yllera para ABC Novias)

6. Mantelerías

El mantel suele ser el gran protagonista de una cena. O al menos lo era hasta ahora: están de moda los individuales, siempre con un muletón por debajo. Existe una magnífica oferta en Los Encajeros (en la foto), en Zara Home y en El Corte Inglés si no se tienen de antes. Aunque una reunión familiar tan larga e importante como la cena de Nochebuena o la comida de Navidad, quizás incluya variedad de aperitivos y “gourmandises” que se pasan de uno a otro comensal, por lo que la alternativa del mantel parece la más adecuada.

7. Flores

En la mesa, las flores no deben molestar ni impedir la visión de los otros comensales. Dado que  las flores de Pascua suelen ser altas, con hojas de fácil caída y poco gráciles, recomendamos algún bouquet bajo que combine un toque de acebo con alguna hortensia en tonos verdes, ocres o rojos  (foto Búcaro Madrid) y alguna ramita de abeto o romero. Para el árbol, hay cientos de versiones, desde los hechos en madera pintada, a los de cartón, los tradicionales de vivero o alguno muy conseguido en materiales sintéticos.

8. Disposición  de la mesa

Han cambiado mucho las tendencias en cristalería pero la norma de colocación sigue la lógica de uso: los vasos y copas se sitúan en la parte superior derecha de su plato correspondiente, para tener fácil acceso desde la mano derecha. Y su uso suele ser también desde la derecha hacia la izquierda del plato. Si se sirve champagne, la copa se puede situar a la izquierda de la del agua, a la derecha de todas o bien tras las copas principales.

En una mesa formal, encontraremos más o menos cubiertos y piezas,  en función del menú que se ofrezca y de las ganas de hacer un esfuerzo que tengamos. En una mesa completa, muy formal se colocarían los siguientes elementos:

  1. Cuchara sopera. 2. Cuchillo de aperitivo o ensalada. 3. Tenedor para aperitivo o ensalada. 4. Pala de pescado. 5. Tenedor de pescado. 6. Cuchillo de trinchar. 7. Tenedor del plato de trinchar o principal. 8. Bajoplato en alpaca, resina o mimbre. Plato llano, plato de entrantes -algo más pequeño-. Y sobre ellos, si es necesario, la taza y platito para consomé o sopa. 9. Cuchillo para untar mantequilla, situado sobre el platito del pan. 10. Platito del pan. 11. En circunstancias formales, una plaquita en cartulina con el nombre del comensal. 12. Tenedor de postre. 13. Cucharita de postre. 14. Copa de aperitivo o copa de champagne 15. Copa de vino blanco. 16. Copa de vino tinto. 17. Copa o vaso de agua. 18. El colmo del chic para recepciones oficiales, sal y pimienta individuales. También se utiliza este lugar para colocar la tarrina de mantequilla individual en el caso de haberla. La servilleta, a la derecha del plato, aunque sobre gustos, ya se sabe. El uso y la colocación de los cubiertos es muy lógico: se colocan por orden de uso, desde fuera hacia el plato. Los que se usan con la mano izquierda, se colocan a la izquierda; los que se usan a la derecha, se sitúan en el lado derecho. Los cubiertos situados a la derecha del plato suelen ser aquellos para los que necesitamos más precisión o fuerza. Excepcionalmente un tenedor de aperitivo o para una ensalada sencilla se puede situar a la derecha, ya que se utilizará solo.

9. Recetas y delicatessen

En las comidas y cenas familiares, es conveniente escoger como plato principal y como segundo, recetas que gusten a casi todo el mundo, huyendo de carnes o pescados muy particulares. Una buena crema de primero y un segundo de lomo ibérico, pavo o pularda, rellenos de ciruelas, pasas y cebollitas, preparados al horno y acompañados de patatitas gratinadas será adecuado para grandes y pequeños. En cambio, en los aperitivos, que son siempre opcionales, se puede ser más extravagante y proponer delicatessen de España y el extranjero: tablas de quesos o foie, canapés originales o alguna delicia de temporada como los aperitivos a base de trufa. (Foto Zara)

10.  Postres y pasteles

El final del almuerzo o la cena es otra ocasión para proponer una variedad de postres que se adapte al gusto de cada comensal. Las tartas y los pasteles se complementan con turrones de distinta procedencia, mazapanes realizados por las monjas en los cientos de conventos de clausura de España, hojaldrinas o polvorones. Un final dulce y tradicional. (Foto ABC Novias).

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