Desde hace varios meses se aplica una ley en Grecia por la que puedes irte sin pagare un establecimiento si no te dan la factura. Es una medida destinada a obligar a los establecimientos relacionados con la comida y la vida nocturna a presentar facturas (y pagar los impuestos correspondientes).
En la madrugada de este sábado un grupo de chicos jóvenes salieron a divertirse en la ciudad de Komotiní, en la región de Tracia (norte de Grecia). Eran cuatro amigos estudiantes que se tomaron una copa en un conocido establecimiento de la plaza central de la ciudad que se llama Avant Garde. Pidieron la factura, el camarero no la trajo y se fueron sin pagar, cuenta Yánis Guerékos,de 21 años. Es un estudiante de tercer año en la facultad de Komotiní para ser profesor de gimnasia. Mientras paseaban por la plaza Yánis escuchó “por 8 euros, pringado” y recibió un puñetazo en el rostro.Se cayó al suelo y el asaltante intentó darle patadas en la cabeza. Los amigos impidieron que siguiera el ataque y reconocieron a lado del asaltante al camarero al que habían pedido la factura. El chico se desmayó y al recuperar el sentido sangraba por la boca, por lo que fue trasladado de inmediato al hospital local dónde le trataron. A los dos días fue enviado a Atenas, dado que tenía una fractura de la mandíbula y deberá ser intervenido en la capital.
La que se armó después de este incidente… la dirección del establecimiento declaró que no tenía nada que ver ningún empleado suyo en este suceso, el chico se ha vuelto un héroe y su familia, que vive en Corfú y se encuentra a su lado, está que trina. Su madre, Sofía, ha declarado a los medios griegos que “no dejaremos la cosa así. Hemos puesto una denuncia. Mi hijo se salvó, pero podría haber ocurrido lo mismo con otro chico y no salvarse. Con tanto odio y tanta maldad. No son los ocho euros, es la política de esas personas (que le atacaron). La prioridad de mi familia ahora es que se repare el daño y que mi hijo se recupere”. Aquí tienen la foto de Yánis en el hospital, con su mamá Sofía.
