Oti Marchante el 05 mar, 2012 No sé qué es mejor si el frontal de Ryan Gosling o el perfil de George Clooney, que es lo que ambos mejor muestran en “Los idus de marzo”. Gosling tiene un primer plano potente (hay que ver lo bien que no dice nada Gosling) y Clooney tiene un perfil (por supuesto, político) que a poco que se descuide lo acabará llevando a la Casa Blanca, como mínimo de visita. La película es, como otras antes, un retrato duro del político americano, demócrata o republicano, de los fontaneros de campaña, de la prensa, de la pasta y de la pasta con que están hechos todos. A mí me ha gustado la película de Clooney, quizá algo pasada de cinismo y con mucha gola en la esencia de su fábula moral, que no es que diga nada que no sepamos o sospechemos, pero que presenta un paisaje desolador en el que la ética, los principios y la lealtad a lo que sea tienen la misma consistencia que un buñuelo de viento. De todos modos, no diré yo aquello que no escuchó Julio César de “¡Cuidaos de los idus de marzo! cine Comentarios Oti Marchante el 05 mar, 2012