En mi larga carrera como periodista de belleza he tenido fragancias para el cuerpo (Nouveau Cologne Refreshing Body Spray de 4711, Body Spray Seductive 212 NYC de Carolina Herrera, Agua Relajante Balneario de Álvaro Gómez…), fragancias para el pelo (Parfum Pour les Cheveux Chanel Nº5, Hair Spray Rose de L’Occitane). Incluso fragancias para las sábanas (Bijoux Indiscrets de Lily Blossoms, Eau de Linge Compagnie de Provence…) o fragancias para la almohada (Deep Sleep Pillow & Body Mist de The Body Shop).
Pero que mis prendas íntimas tengan su propio perfume ya me parece lo máximo!!!!
O lo mínimo. Porque ¿si ya lo tenía mi ropa de cama, por qué iba a ser menos mi ropa interior?
Mon Eau de Lingerie La Petite Robe Noire de Guerlain (61,20 €) es un gesto inédito que se va a convertir en un aliado de las mujeres más seductoras.
Su bruma etérea se vaporiza sutilmente, sin mancha, en la lencería más chic.
¡Nunca había sido tan sexy vestirse. Y desvestirse!
Tiene la misma fragancia ultra femenina de La Petite Robe Noire de Guerlain, cuya estela (notas de cereza negra, bergamota, rosa búlgara, rosa turca…), estaba destinada a perfumar los vestiditos negros –de ahí su nombre- y que ha cautivado ya a miles de mujeres.
El frasco está decorado con un dibujo del dúo Kuntzel+Deygas, los mismos artistas que han transformado el mítico frasco “corazón invertido” de la versión clásica, en un Eau de Parfum Edición Limitada. En este caso, se trata de la silueta de una Cenicienta moderna que, sobrepasado el permiso de la medianoche, vuelve a su frasco de puntillas, con los tacones en la mano”.
Para el perfume de nuestra ropa interior, esa Cenicienta aparece semidesnuda, subida a unos “stilettos”, y lista para enfundarse en su vestidito negro.
¿O será que se lo acaba de desenfundar?
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