Disraeli, aquel aristócrata y político británico de principios del siglo XIX, varias veces ministro y primer ministro, nos dijo una vez que “como todos los grandes viajeros, he visto más de lo que puedo recordar, y recuerdo más que lo que he visto”. Los recuerdos son difíciles de manejar. Permanecen los que quieren en nuestra cabeza, y se escapan otros, como amantes rebeldes. A veces nos hacen volver a una ciudad intrascendente, en la que no pasó nada, y a veces nos privan de un nombre o un café que quisiéramos recuperar, que se escurre entre los dedos. Las fotografías de viajes ayudan a mirar atrás. A veces son tan malas que provocan cierta ternura. Pero no es este el caso. Cuando acaba cada año, hay fotos de viajes tan extraordinarias que merecen un concurso, una exposición, un pinchazo en un post que las reseña. En este blog y en nuestra página web hemos hecho de la frase “todos los días son viaje” un estilo de vida. Para estos fotógrafos, es una realidad luminosa. Los premios The Travel Photographer of the Year (TPOTY) se centran en el trabajo de los fotógrafos, sin ninguna otra consideración detrás. Cada año, su jurado selecciona las mejores imágenes entre participantes de 110 países, aficionados (de todas las edades) y profesionales. Esas fotos formarán parte de una exposición en el Museum of Docklands en el verano de 2016. Aquí os dejo algunas de ellas, como un regalo de Navidad para soñar un rato con otros paisajes y otras vidas.
Portfolio completo de fotos ganadoras, aqui.
Fotografía