La blasfemia que hace reir a Colau

No sé si la poeta Dolors Miquel, por decir algo, que leyó el poema blasfemo contra la Virgen, se atrevería a hacer algo similar contra Mahoma o los musulmanes. Me temo que no, porque corre el riesgo de que alguien se tome la justicia por su mano. Lo hace contra los católicos, que aguantan estoicamente la constantes muestras de intolerancia que una y otra vez reciben de esta izquierda radical y sectaria.

Ella, tan valiente y tan poco respetuosa con las creencias de los demás, tuvo el mal gusto de poner la guinda en la entrega de Premis Ciutat de Barcelona con un bodrio insultante para todos los católicos, que se merecen un respeto .

De su, espero que irrepetible intervención, solo quiero dejar constancia de un fragmento para que los lectores se hagan una idea de lo que fue: “Mare nostra que esteu en el zel sigui santificat el vostre cony, l’epidural, la llevadora…” (Madre nuestra que estáis en el celo, sea santificado vuestro coño, la epidural, la comadrona…]

Estas palabras hubieran merecido que la mayoría de los asistentes abandonaran el acto, pero solo lo hizo el concejal popular Alberto Fernández. A la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no le debieron parecer demasiado irrespetuosas estas palabras y se limitó a escribir en su cuenta de Twitter  que «vivimos momentos de cambio y necesitamos una cultura valiente y comprometida que llegue a todos».

Además, en su cuenta de Facebook asegura que «lo que algunos medios han llamado “Padrenuestro blasfemo” o “Padrenuestro sexual” era en realidad una “Madrenuestra” que cantaba a la vida y a la libertad», asegura la alcaldesa, que recomienda leer el poema entero.

Cultura valiente hubiese sido pedir respeto, cultura valiente hubiera sido no permitir que se rían de las creencias de los demás, cultura valiente es aquella que utiliza los mismo argumentos para criticar a todos, no solo a los mismos de siempre.

!Y esta izquierda pide respeto, cuando no lo tiene por los demas!

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