Aunque quedan pocas semanas para el final de la fase regular de la NBA, los ojos del aficionado al baloncesto en Estados Unidos no está estos días en las canchas profesionales. Es tiempo de “March Madness”. Tiempo de locura por el baloncesto universitario. Y por unos días, la atención del país se focaliza en el deporte universitario, que celebra estos días su parte final de la temporada a la espera de conocer al campeón.
Llegados a este punto, sólo quedan los 64 mejores equipos del país. Universidades con mucha o poca tradición a las que solo les queda luchar por ser el campeón el próximo 8 de abril. Es tiempo de pronosticar quién será el que levante el título. Un “deporte nacional” estos días en EEUU, donde grandes y pequeños, ricos y pobres, completan su cuadro de emparejamientos. Una porra de toda la vida, pero a lo grande. Desde el principio del torneo.
Dentro de esa tradición, también lo es que el presidente del país, en este caso Barack Obama, sea uno más. Tratándose de un aficionado confeso al deporte de la canasta, Obama incluso disfruta con la misión de acertar quién será el campeón, aunque en su “bracket” de esta temporada no se ha mojado mucho. “No es una elección arriesgada, lo sé, pero creo que es el año de Indiana”, apuntó el presidente, un gran aficionado al baloncesto, deporte que practicó durante sus años de universitario.
El año pasado, Obama acertó dos de los cuatro finalistas del torneo, dejando claro que no es un aficionado más y que cuando se trata de la canasta, sabe de lo que habla. Habrá que ver si este año se le da igual de bien eso de pronosticar. El “March Madness” está aquí. Prepárense a disfrutar con las próximas figuras de la NBA.
Otros temas