Los Rockets llevan meses mandándole cantos de sirena a Pau Gasol. En la pretemporada estuvieron muy cerca de hacerse con sus servicios. Entonces, fueron los Hornets los que abortaron el traspaso a tres bandas, que habría llevado a Pau a Houston y a Chris Paul a los Lakers. Ahora, meses después y tras varios intentos fallidos, parece que la operación vuelve a estar avocada al fracaso.
La semana pasada, Mitch Kupchak, el general manager de los Lakers, dijo no a una oferta que incluía a Kevin Martin, Luis Scola y Goran Dragic a cambio del español. Una oferta jugosa, que no incluía a Kyle Lowry, el verdadero objeto de deseo del conjunto angelino y el base que quiere Mike Brown para dirigir los destinos del equipo.
A cuatro días del cierre de mercado (jueves 15 de marzo, a las 21:00 horas), parecía que la operación se iba a reanudar, pero una lesión de última hora del base de los Rockets puede hacer que Gasol, definitivamente, se quede en Los Ángeles hasta final de temporada.
Lowry fue ingresado el pasado jueves en un hospital de Nueva York con fiebre y dolores abdominales. Una exploración posterior diagnosticó una infección vírica que le tendrá apartado de las canchas durante las próximas semanas. Teniendo en cuenta, que la temporada regular terminará el 26 de abril, un hipotético traspaso que incluyera al base a cambio de Gasol no sería de gran ayuda para unos Lakers que, a duras penas llegarían a disputar los play offs.
Sin Lowry dentro del paquete (habría que ver si Brown traga y acepta un traspaso de un jugador lesionado), las opciones de Pau para seguir en LA aumentan exponencialmente, ya que parece que Minnesota y San Francisco, las otras dos franquicias que se habían interesado por el español, han desistido.
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