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Blogs Pasando por el aro por Emilio V. Escudero

¿Puede Marc ganar el anillo en Memphis?

¿Puede Marc ganar el anillo en Memphis?
Emilio V. Escudero el

Antes que nada, me disculpo por la falta de actividad en esta bitácora en las últimas dos semanas. Es lo que tiene pasarse el verano trabajando, que luego llega el invierno y uno tiene que quemar las vacaciones. Este retiro me ha servido para descansar, pero también para estar atento (más aún) a lo que sucede en la NBA, que cumplido el primer cuarto de la temporada, comienza a aclarar su panorama. 

En España, hablar de los Grizzlies es hacerlo de un equipo modesto y sin lustre. Un equipo acostumbrado a perder y acumular derrotas sin más objetivo que intentar meterse en los playoffs por la puerta de atrás. Es la imagen que se creó para el gran público cuando Pau Gasol aterrizó en la ciudad de Elvis allá por 2001. Con él, la franquicia comenzó a crecer. Logró entrar en la postemporada, aunque no pasó de ahí, como si el objetivo estuviera cumplido.

Su traspaso a los Lakers sumió al equipo en una nueva reconstrucción, la enésima, que parece haberse convertido en la definitiva. Lo que Pau empezó en 2001 podría tener este año su culminación y no hablo de volver a entrar en playoffs, algo que se ha convertido ya en algo habitual para los Grizzlies. El anillo es un sueño complicado, pero al alcance de estos Grizzlies de ritmo cansino pero efectivo. Un equipo que se ha asentado en los puestos altos de la Conferencia Oeste, por encima incluso de los actuales campeones, los San Antonio Spurs.

Asentados en una defensa muy sólida, la mejor del campeonato con 93,5 puntos encajados por partido, Memphis ha ganado 16 de los 20 partidos disputados hasta el momento. Una marca impensable en los primeros años de Pau allí, cuando ganar 16 encuentros en una temporada completa podía considerarse poco más que un éxito.

La principal razón de que los Grizzlies sean un aspirante al anillo a día de hoy es que han demostrado que son capaces de ganar a cualquier equipo tanto en el FedEx Forum como a domicilio. Su juego gira alrededor de la figura de Marc Gasol, cuyos números de estrella le auguran un “contratazo” el próximo verano. 19 puntos, 8,1 rebotes, 3,7 asistencia y una incidencia brutal en la eficacia del equipo. Es la estrella de unos Grizzlies corales, en los que nadie destaca más que él, pero donde todos tienen su importancia. Empezando por Conley, un base irregular de amenaza constante, siguiendo por un perímetro obrero -Allen, Prince, Pondexter, Carter, Lee- y un compañero de zona como Zach Randolph, capaz de lo mejor y lo peor, aunque exhibiendo una gran temporada como el español este año.

Con esos mimbres, los Grizzlies lo tienen todo para aspirar al anillo, aunque para ello deberán contar también con la versión más gris de sus rivales. Unos Spurs o unos Thunder que no han levantado aún el vuelo, o la falta de sintonía de los Cavaliers de LeBron. El sueño está aún lejos, pero la buena noticia es que los Grizzlies son ya uno más de los aspirantes y eso, si miramos hacia atrás, es un logro gigantesco para ellos.

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Emilio V. Escudero el

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