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Blogs Notas del Espía Mayor por Javier Santamarta del Pozo

Nación de Españas

Nación de Españas
Pedro Sánchez en audiencia con Felipe II, dibujo de Ricardo Sánchez.
Javier Santamarta del Pozo el

Contaban que, cuando venían a entrevistarse con el rey Felipe II al Palacio Monasterio de San Lorenzo de El Escorial los ministros, dignatarios y embajadores varios, entre la espera en la asombrosa Sala de Batallas, y la impresionante autoridad de quien sería un rey burocrático, meapilas y todo eso tan negrolegendario que quieran, pero de una inteligencia penetrante como pocas, los nervios se hacían huéspedes en los que llegaban a entrevistarse con él, de modo que lo primero que decía el Prudente era un “sosegaos, sosegaos”… ¡que obviamente les ponía más nerviosos!

El caso es que, paseando como Espía Mayor por el despacho en donde se regía todo el orbe conocido y hasta por conocer, y recordando las declaraciones del presidente Sánchez sobre lo de que España es nación de naciones (sic), me dio por pensar cómo sería una entrevista entre él, y el primero que se intitularía como “Rey de las Españas”. En plural, sí.

Pedro Sánchez —Perdonad que llegue tarde una hora, Majestad, y así de sudado, pero es que no creía que había tantos escalones y la Lonja fuera tan grande y…

Felipe II —Sosegaos, don Pedro, sosegaos.

PS —No, si mi persona lo está, pues como presidente de gobierno que soy…

FII —Ya, ya. No empecemos por esos circunloquios que al final no sabré con quién estoy hablando de todos los que dice su exégeta doña Carmen que es.

PS —¡Pues aquí tiene a mi persona para lo que quiera que le explique como presidente de gobierno con relación a lo que parece que no acaba de entender sobre mi propuesta de federalismo asimétrico plurinacional autonómico!

FII —A ver, cómo se lo explicaría yo, mi buen secretario Pérez ¡digo Sánchez! Que a veces me lío con Antonios y Pedros no sé yo por qué. Acercaos a este mapa. No tengo claro si vuecencia ha entendido la jerigonza que me ha soltado, pero creo que tiene un cacao de ese que nos viene de la Nueva España, pero bien espeso. Que me da que no sabe ni sobre quiénes tenéis vos mandato.

PS —Como presidente de gobierno que soy, no tengo problema para ser el presidente de todos y todas. Y cuando digo todas, es de todas las naciones que compone España.

FII —¿Y cuálas naciones son esas, querido secretario? A ver si enumerándolas, me hacéis vos la merced de aclarar este galimatías.

PS —Para mí España es una nación de naciones. Y Cataluña es una nación.

FII —¿Dice el Principado? ¿Y qué pasa con Aragón?

PS —Aragón no.

FII —¡Anda! Como Murcia que he oído que un edil de la ciudad Condal decía que no era.

PS —Es que naciones son España, Cataluña, el País Vasco y Galicia.

Despacho de Felipe II en el Palacio Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, foto de Jose Javier Martin Espartosa.

FII —A ver, Sánchez. O está vuecencia falto de oxígeno (¡y eso que estamos a las faldas del Guadarrama!), o le ha dado a un cuartillo de vino con más vinagre que la esponja de Nuestro Señor. Que no me parece mal que cite a mi querido Principado como tal cosa, que dudas tuve de poner entre Lisboa y Barcelona, capital de mis reinos en la antigua Barcino. Que me place que cite mi Señorío tan grato de Vizcaya, que no hay más leales secretarios que los de allá. Y que buen sitio es donde resta nuestro patrón Santiago. Pero lo que no entiendo es por qué me cita a España en esa mixtura…

PS —Es que me da que Su Majestad, que mucho Lisboa y Barcelona, pero la capital se la llevó a Madrid. Vamos, que un poco centralista es, y claro…

FII —¡No diga sandeces, Sánchez, que me encocoro! Venga junto a este mapa le digo. ¿Ve? De aquí soy yo señor. De todos estos y tan variados sitios. Y por eso fui proclamado y reconocido como rey de Castilla, de León, de Aragón, de Portugal, de Navarra, de Granada, de Valencia, de Toledo, de Galicia, de Mallorca, de Sevilla, de Córdoba, de Murcia, de Jaén, de los Algarves, de Algeciras, de Gibraltar, de las islas Canarias, Conde de Barcelona, de Rosellón y de Cerdaña, Señor de Vizcaya y de Molina… y no le doy la lata con las Tierras allende del Mar Océano y con Jerusalenes y otros títulos que no vienen al caso para no marearle. ¿Centralista yo?

»¡Yo soy el rey de las Españas! Porque todo eso es España. Muchas y varias, pero que así la conforman. No se me lie, secretario Sánchez, que de siempre hemos sido muchos y todos de nuestro padre y de nuestra madre. Y nadie nos va a quitar el orgullo por nuestra patria chica, que es el sitio de nuestra nacencia. Pero como naciones fueron las Tribus de Israel, y fueron doce, usted diga lo que quiera. Pero si quiere hablar de las Españas piense bien que España somos todos. ¡Como Hacienda! Y que ser ¡y a mucha honra!, vizcaíno, catalán, gallego, granadino o madrileño no le hace a uno ser menos español. Y no me venga con milongas de quienes dicen lo contrario. Pues el que quiere restar, es que no quiere sumar.

»Que en estos nuestros reinos tuvimos leyes antes que reyes. Pero sin ley, no habrá rey, ni república, ni su persona que valga.

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