En su sexto artículo para Jugar con Cabeza, José Miguel Espinar, que ha empezado a trabajar como profesor de EducaPoker, reflexiona sobre la creciente popularidad del juego en España.
Incluso la guerra puede ser un lugar más llevadero con una baraja y unas fichas. Foto: AP
El poker no para de hacerse más conocido en España. Es increíble el aumento de popularidad que ha tenido el juego en los últimos meses; prácticamente todo el mundo ya lo conoce e incluso juega de forma casual. Yo ya llevo siendo jugador profesional más de tres años. Con profesional quiero decir que me gano la vida jugando a poker, y he visto cómo ha evolucionado el mundo del póquer en estos últimos años.
Cada vez más se oye hablar de poker en ambientes de lo más diversos. Muchas veces quedo con algún grupo de amigos o conocidos, a los que hace bastante tiempo que no veo, y siempre termina por salir el tema. Cuando me preguntan a qué me dedico y yo se lo cuento, aparecen amigos o amigos de amigos que juegan regularmente. Normalmente estos amigos de amigos suelen ser esas mismas personas con las que estoy hablando, que tienen algún recelo en decir abiertamente que son ellos los que se echan esas partiditas.
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José Miguel Espinar, un profesor y profesional del póquer capaz de amasar grandes cantidades de fichas. Foto: PokerStars
A medida que la conversación avanza, queda claro que están ávidos de información, ya que el tema les interesa. Ven cómo otra gente gana dinero y no pueden resistir la tentación de preguntar algo. Siempre acaban confesando que ellos mismos son jugadores.
Al final, su pregunta es siempre la misma: ¿qué haces para ganar? Hay que ser un súper matemático, ¿verdad?
Ante esta afirmación estoy totalmente desarmado. No existe una receta mágica que haga que ganes jugando a poker. Si bien no hace falta ser un gran matemático, pues los cálculos que realizarás son básicamente multiplicar y dividir, el éxito en el poker depende en gran medida del tiempo y esfuerzo que dediques a mejorar.
Esto también me lleva a pensar que sigue habiendo un recelo generalizado con el juego. Aunque poco a poco va evolucionando la imagen que tenemos de él, es inevitable tener cierto temor a ser encasillado en tópicos referentes al tipo de gente que siempre ha practicado el poker. Nada más lejos de la realidad. Hoy por hoy, cualquier persona juega a poker y no debería ser algo de lo que avergonzarse.
Sin ir más lejos, yo antes de ser jugador tenía un trabajo totalmente normal. Era comercial. Concretamente, vendía calefacciones, y me sentía muy orgulloso y a gusto con lo que hacía. Mi cambio a jugador vino a raíz de ver cómo varios de mis amigos de siempre jugaban regularmente y les iba bien.
A mí me gustaban mucho los videojuegos y no pude resistirme a probarlo. Gracias a esta curiosidad descubrí que podía ganarme la vida con algo que me divertía. Desde ese momento hasta ahora, muchas cosas han cambiado, he tenido mucha suerte al conocer a grandes personas y he podido progresar como profesional hasta llegar a ser profesor para una escuela de poker online.
Foto: AP
El pasar de ser comercial a jugador me ha dado cierta independencia económica y libertad de horarios. Por lo demás, creo que soy un trabajador normal que lucha por abrirse paso. Mi caso no es aislado ni mucho menos, podría nombrar a decenas de personas en la misma situación a las que el poker les ha cambiado la vida.
Por todo esto creo que poco a poco el poker va dejando de ser un juego tabú convirtiéndose en un entretenimiento de masas. Con la nueva legislación en España, su popularidad aumentará, ya que comenzará a aparecer en los medios de forma mucho más frecuente, pasando a convertirse en algo cotidiano.
Hace unos años la situación era muy distinta. Si comentabas que te dedicabas a jugar te tachaban de ludópata o cosas peores. La realidad es muy distinta, pues para los que nos tomamos el poker como medio de vida, la preparación es lo más importante. Pasamos muchas horas analizando nuestro juego y esforzándonos por mejorar intentando no dejar al azar más que lo inevitable.
En los próximos años estoy seguro de que el poker continuará creciendo y cada vez más gente verá el juego como lo que realmente es, un juego de estrategia con cierto componente de azar.
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