Gracias a Jesús Medina Molina, promotor del ajedrez en Holanda que está llenando sus parque de mesas para jugar, descubro que ayer se inauguró en Schiermonnikoog la primera Isla de Ajedrez del mundo. El acto coincidió con la celebración de la cuarta edición del Global Chess Festival impulsado en Hungría por Judit Polgar. La isla, que nace con la idea de conectar a los ajedrecistas de todo el mundo, no llega a los 200 kilómetros cuadrados (con menos de 50 de tierra firme) y solo tiene 950 habitantes, pero recibe 300.000 turistas cada año.
Antes de nada, un poco de Wikipedia: Schiermonnikoog es una de las islas frisias. Fue propiedad de los monjes cistercienses primero y luego estuvo en manos privadas durante tres siglos, hasta mediados del XX. En 1989 fue declarada parque natural por el Gobierno de Holanda. Tiene 18 kilómetros de playas y 30 de carriles bici, por lo que no solo se practicará allí el ajedrez, por supuesto. Aparte de bicicletas, solo circulan por su territorio autobuses eléctricos.
La alcaldesa de Schiermonnikoog, Ineke van Gent, explicó en qué consiste la idea de convertir en una isla de ajedrez: «Es un lugar donde se juega y se aprende ajedrez, donde jóvenes y viejos se involucran de una manera accesible. La atmósfera y el ambiente de Schiermonnikoog invitan a ello. Hemos colocado un gran número de mesas públicas de ajedrez, para crear una cultura de parque propia de los países mediterráneos, donde la gente se reúne».
De momento, el día de la inauguración tuvo lugar el Torneo Juvenil de Ajedrez Lytje Willem, en colaboración con la Federación de Ajedrez de Frisia y Noreste. El maestro internacional Hans Böhm impartió la clase magistral «¿Cómo aprender ajedrez en un día?», mientras que la escritora Joyce van de Meijden leyó en público su libro «Simón el ajedrecista», dentro de la Semana del Libro de los Niños.
Todas las actividades se pueden encontrar en la página web de la isla, de momento solo en perfecto holandés.
Una de las características de este paraíso del ajedrecista es que todos los niños aprenden a jugar en el colegio. También se ha creado un juego de ajedrez (piezas y tablero), cuyo diseño está inspirado en los famosos faros de la isla. De ahí el color rojo y no negro de uno de los bandos. Estos juegos están a la venta en cualquier rincón de su territorio. De hecho, probablemente está feo ir allí y no comprar alguno.
Judit Polgar declaró que «es un gran placer ver ideas tan hermosas cada año en las que el ajedrez conecta a las personas». «Schiermonnikoog es una isla hermosa, donde a partir de ahora habrá ajedrez por todas partes. Espero sinceramente que estos encuentros espontáneos den un nuevo impulso a la isla, que espero visitar pronto para comprobar sus avances en persona», añadió la mejor jugadora de la historia, que promueve el lema «el ajedrez nos conecta».
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