La reubicación de don Nicanor

La retirada de la placa en honor de Nicanor Villalta para en su lugar colocar la de El Cordobés, se debe a su adaptación a la estética de las otras placas colocadas con posterioridad y a su posterior reubicación, según palabras de Carlos Abella, director gerente del Centro de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid. Bueno, pues que una vez restaurado, tocará reubicar a don Nicanor, que ya son ganas, con los años que hace que el gran diestro aragonés llevaba en su sitio, presidiendo la colección de toreros honorables por ser él precisamente el que más honor dio a las plazas de Madrid con esas inigualables 54 orejas.
Claro que si no es por que en su lugar el pasado martes colocaron la del genial Manuel Benítez ni nos enteramos de la restauración, ni mucho menos de la reubicación, ni si a partir de ahora va a haber más remodelaciones entre tanta placa de honor, porque podemos asistir al tetris de las placas. Donde estaba don Nicanor ponemos la de El Cordobés. Ortega que vaya con Pepe Luis, y Ordóñez con Diego Puerta. ¿Y con El Viti, qué hacemos? No hay problema, lo reubicamos.
Reubicar, reubicar, reubiquemos…, por ahora le ha tocado a don Nicanor, que era el que menos culpa tenía. A ver dónde lo ponen, seguiremos atentos.