2) La transición verde: Es uno de los elementos transversales de las políticas europeas. La Estrategia se proponía establecer alianzas verdes con países afines, dialogar con los principales países emisores, proteger la biodiversidad, cooperar para lograr modelos de producción circulares y extracción responsable de recursos, promover una transición energética justa e implementar una estrategia de transporte inteligente y sostenible.
En el terreno de las alianzas verdes se ha avanzado poco. A la que ya existía con Japón en el Indo-pacífico se ha añadido Canadá que, aunque tiene fachada al Pacífico y ha elaborado su propia Estrategia para la región, es dudoso que pueda ser considerada como potencia indo-pacífica según la caracterización geográfica que hace la UE.
Mucho más ambiciosa y prometedora es la Iniciativa Verde-Azul para el Pacífico, que se lanzó en noviembre de 2021 durante la COP26 y que combina la transición verde con la economía azul y busca mitigar el impacto del cambio climático, asegurar una gestión sostenible de los océanos, promover infraestructuras verdes y energías renovables. En Fiyi bajo está Iniciativa se ha promovido la energía hidráulica y en Papúa Nueva Guinea se ha implementado un programa de Biodiversidad, Cambio Climático y Bosques.
Otra iniciativa de la UE es la Transición Energética Justa (JETP), que busca favorecer una transición suave de los combustibles fósiles a las energías limpias, atendiendo sobre todo al impacto social. Ya se han firmado acuerdos con Sudáfrica, Indonesia y Vietnam y se está negociando un acuerdo con la India.
3.- Gobernanza de los océanos. Bajo esta prioridad la UE trata de promover la gestión sostenible de los océanos y la protección de la biodiversidad. Los principales logros en estos años han sido: 1) La firma por la UE y sus EEMM del Acuerdo de NNUU sobre la Conservación y el Uso Sostenible de la Biodiversidad Marina de las Áreas más allá de una Jurisdicción Nacional, más conocido como Tratado del Alta Mar; 2) Los Acuerdos de Partenariado en Pesquerías Sostenibles, de los que hay firmados en el Indo-pacífico con Seychelles, Mauricio, Madagascar y Kiribati; 3) El apoyo a las Áreas Marinas Protegidas con el objetivo 30×30 (protección del 30% del océano para 2030) y la creación y gestión efectiva de estas áreas en el Pacífico Sur; 4) Lucha contra la pesca IUU mediante la prohibición del acceso a los mercados europeos de los productos marinos de países que practican la pesca IUU. En el Indo-pacífico esta prohibición se aplica a Camboya y a las Comores; 5) Ingreso en la Asociación de la Cuenca del Océano Índico. La UE se convirtió en Socio de Diálogo de la Asociación en enero de 2024.
4.- Gobernanza digital y partenariados. La UE busca establecer partenariados digitales en el Indo-pacífico cuyos objetivos son: la cooperación en infraestructuras digitales, la transformación digital de los negocios y los servicios públicos y el desarrollo de capacidades de cara al comercio digital. Con esto la UE espera desarrollar junto con países afines los estándares para las tecnologías emergentes como la inteligencia artificial de manera respetuosa con los principios democráticos y los derechos fundamentales.
Los principales logros han sido: La firma de los partenariados digitales con Japón (mayo de 2022), Corea (noviembre de 2022) y Singapur (febrero de 2023); conclusión de un acuerdo sobre comercio digital con Corea; el inicio de las negociaciones con Singapur para la firma de un acuerdo sobre comercio digital; el acuerdo con Japón sobre flujo de datos transfronterizos.
Por poner un ejemplo de lo conseguido en los partenariados digitales, el suscrito con Japón cubre: el 5G seguro, la inteligencia artificial, la resiliencia de los semiconductores y la identidad digital. Los acuerdos sobre comercio digital, como el alcanzado con Corea, buscan crear normas que den confianza a los consumidores y aseguren su privacidad y protección de datos, proporcionen predicibilidad y certeza legal a los negocios y faciliten los flujos de datos de confianza, al tiempo que eliminan y previenen la aparición de barreras injustificadas al comercio digital.
Dentro de esta prioridad se incluyen la cooperación internacional en investigación e innovación, promovida mediante el programa Horizonte Europa, y la cooperación educativa.
Bajo Horizonte Europa se ha lanzado el proyecto INPACE (2024-2027), que busca crear un hub europeo en el Indo-pacífico para la colaboración en tecnologías digitales. INPACE busca también colaborar a la implementación de los partenariados digitales con Japón, Corea y Singapur y la cooperación con India en el marco del Consejo de Comercio y Tecnología.
5) La conectividad sostenible es la quinta prioridad. La conectividad es el palabro de moda en el Indo-pacífico desde que ASEAN lanzara su Plan Maestro de Conectividad en 2010. La Iniciativa de la Franja y de la Ruta lanzada por Xi Jinping en 2013, ha sido la gran iniciativa geopolítica de conectividad, que ha modificado el paisaje geopolítico en Eurasia y más allá. Cuando se elaboró la Estrategia de la UE, la IFR había logrado superar el reto que supuso la COVID. Hubo un leve retroceso en inversiones y contratos entre 2020 y 2021. Para 2021 se había percibido ya una tendencia hacia proyectos de menor calado y una mayor preocupación por la sostenibilidad medioambiental en respuesta a críticas recibidas. Estas tendencias se confirmarían durante el Tercer Foro de la Iniciativa de la Franja y de la Ruta que se celebró en Pekín en octubre de 2023.
La UE desde el documento Connecting Europe and Asia de 2018 ha defendido un modelo de conectividad que sea sostenible social, mediambiental y financieramente. La UE escogió como herramienta para desarrollar la conectividad el Global Gateway, lanzado en 2021 con el compromiso de movilizar hasta 300.000 millones de euros. Los principios que deberían inspirar el Global Gateway eran: 1) Valores democráticos y normas rigurosas; 2) Buena gobernanza y transparencia; 3) Asociaciones igualitarias con los países destinatarios de las inversiones; 4) Acciones ecológicas y limpias; 5) Centrado en la seguridad; 6) Capaz de catalizar la inversión del sector privado.
Aunque desde la UE se negase que quisiera rivalizar con la IFR, inevitablemente muchos la vieron como una alternativa a ésta. Se quería que Global Gateway mostrase el compromiso de la UE con el Indo-pacífico y que fuese geoestratégica.
Casi cuatro años después, puede afirmarse que Global Gateway no ha respondido a las grandes expectativas puestas en él. En muchos casos lo que hizo fue simplemente un reetiquetado de operaciones que ya existían. No todas las operaciones aprobadas han tenido una visión y alcance realmente geoestratégicos, ni han sido realmente transformacionales. Un problema adicional es que sus proyectos están repartidos a lo largo de todo el mundo. Dicho esto, hay que reconocer que algunos proyectos sí que han tenido una visión más estratégica. Ejemplos: el sistema de cable submarino Medusa, un cable de fibra óptica de 7.100 kms que conecta el norte de África con el sur de Europa y facilita la conectividad entre universidades y pequeñas y medianas empresas; la construcción del primer en el Sudeste Asiático centro de datos Copérnico para mejorar el monitoreo de desastres; el cable submarino de fibra óptica Bella II, que une Europa con Latinoamérica y el Caribe; el Parque de Energía Verde en Brasil para la construcción de una unidad generadora de hidrógeno renovable para un gran megahub de productos siderúrgicos bajos en carbono.
6) Seguridad y defensa: La UE busca con esta prioridad convertirse en un actor en seguridad y defensa en el Indo-pacífico y promover una arquitectura regional de seguridad abierta y basada en normas. Los componentes de esta prioridad son: 1) Énfasis en la seguridad marítima, con la declaración de Áreas de Interés Marítimo y las Presencias Marítimas Coordinadas, basándose en la experiencia de la Operación Atalanta; 2) Adhesión a foros multilaterales de seguridad como la Reunión de Ministros de Defensa del Pacífico Sur, la Reunión Ampliada de Ministros de Defensa de ASEAN o el Simposio Naval del Océano Índico; 3) Los programas CRIMARIO II (capacitación a los Estados ribereños para que ejerzan un control efectivo sobre las rutas marítimas críticas que pasan por su territorio) y ESIWA (con cuatro áreas de trabajo: seguridad marítima, contraterrorismo, ciberseguridad y gestión de conflictos). Este aspecto de la Estrategia conviene ponerlo en relación con la Brújula Estratégica que se lanzó en 2022.
Los logros en la realización de esta prioridad han sido importantes. La UE es cada vez más vista como un socio en la provisión de seguridad marítima en el Indo-pacífico. El 1 de enero de 2025 entró en vigor el Partenariado de Defensa y Seguridad con Japón, que comprende, entre otros, la realización de ejercicios navales conjuntos, cooperación en ciberseguridad y diálogo sobre desarme y no proliferación; un partenariado similar está siendo negociado con Corea. Desde enero de 2021 existe un Diálogo sobre Seguridad Marítima UE-India, para reforzar la cooperación operativa en el mar; la cuarta edición del Diálogo tuvo lugar el pasado marzo en Nueva Delhi.
Pero también hay algunos peros en esta prioridad. Las Operaciones Atalanta y Aspides (esta última se lanzó en febrero de 2024; geográficamente cubre el Mar Rojo) han llevado al límite las capacidades navales de los EEMM. No hay recursos para declarar nuevas áreas de interés marítimo. Además, se trata de unas actividades en las que falta la unanimidad entre los EEMM. En todo caso, no cabe esperar que los EEMM del Indo-pacífico lleguen a ver a la UE como un proveedor de seguridad al mismo nivel que EEUU y más en un contexto de rivalidad agudizada entre EEUU y China.
7.- Seguridad humana. Las iniciativas han sido numerosas, pero tal vez no hayan tenido tanto eco, porque es algo que la UE ya venía haciendo y porque geopolíticamente se ha puesto en énfasis en otras prioridades. Ejemplos de actividades realizadas bajo esta prioridad son ayuda a la recuperación de Pakistán de las inundaciones de 2022, que cubrieron el 30% del país; apoyo a Bangladesh en la crisis de los refugiados rohingyas; ayuda a la recuperación de Vanuatu de los ciclones Judy y Kevin y del terremoto de 6,5 de marzo de 2023; preparación de Micronesia para hacer frente a la sequía; visita de estudios de encargados de los EEMM de ASEAN de la gestión de desastres.
En resumen, la UE se ha tomado en serio el Indo-pacífico y en estos cuatro años ha dado pasos importantes. Las prioridades en las que más se ha avanzado han sido la 1 (Prosperidad sostenible e inclusiva), y la 6 (seguridad y defensa), que además era algo novedoso en la aproximación de la UE hacia la región. La 6 está muy imbricada con la Brújula Estratégica y con la Estrategia de la UE para la Seguridad Maritima, cuya última versión es de octubre de 2023. Tal vez las mayores decepciones hayan venido de la prioridad 5 (conectividad), donde las grandes expectativas creadas por Global Gateway no se han concretado.
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