Tomás González-MartÃn el 02 dic, 2010 Es un chaval que te sorprende constantemente, por su capacidad de alcanzar el más difícil todavía. Este año ha demostrado su clase. En cuanto le han concedido una máquina competitiva. Y ha descubierto sus cartas: una ambición sin límites y una confianza que da miedo. Hasta Jorge Lorenzo, el mejor piloto del mundo, lo dice. Marc Márquez jubilará a todos los grandes campeones españoles. A los 17 años, el ilerdense tiene una calidad descarada que solo Dani Pedrosa demostró hace ocho años. El alumno magistral de Emilio Alzamora acaba de estrenar su máquina Suter en su nueva cilindrada, Moto2, y los ojos le brillan de ilusión. No descarta luchar por el título en la primera temporada e incluso conquistarlo. Quiere emular a su amigo Dani, que ascendió de 125 a 250 en 2004 sin poder hacer pretemporada, dada la rotura de sus dos tobillos, y debutó en el cuarto de litro con una victoria que fue preludio de la corona. Ahora, Marc lo tiene más difícil, porque la nueva división, Moto2, es de 600 centímetros cúbicos y las monturas son más pesadas y menos ágiles. Pero el niño de Cervera ha vislumbrado que dominará la “cabra”. No piensa adquirir más peso para controlar la Suter. Solo cogerá un poco más de músculo. Es tal su valía que Márquez opina que lo importante para ser rápido es correr con relajación. Su seguridad le concede esa tranquilidad a los mandos de una moto. Marc, en efecto, los jubilará a todos en cuestión de pocos años. Estará una o dos temporadas en Moto2 y cuando ascienda a MotoGP será “rookie” del año, camino de triunfar como Rocky: los dejará K.O. Técnico. deportes Comentarios Tomás González-MartÃn el 02 dic, 2010