Sé que no soy de fiar con el cine de Woody Allen, pero, a pesar de ello, no me esconderé entre las ramas: me ha encantado “Medianoche en París”. Llena de sorpresa, de inteligencia, de sencillez y complejidad, de lirismo y de cultura… Tengo la sensación de que no he sido el único que ha visto boquiabierto la película, una de esas de Woody Allen en la que te quedarías a vivir. Y con que sutileza le escribe “en español” su carta de amor a París, casi, casi, con una osadía que les ha debido golpear a los franceses en plena “grandeur”.
Enlazo con una entrega de urgencia volcada en el abc.es
Un momento dulce con la musa Cotillard
Momento Bruni
