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Blogs Tras un biombo chino por Pablo M. Díez

Los “reventas” del iPhone en Pekín

Pablo M. Díez el

Sin cortarse un pelo y a cara descubierta, un enjambre de “reventas” ofrece los últimos modelos del iPhone 4 blanco y del iPad 2 justo en la puerta de la tienda Apple de Pekín, ubicada en el coqueto centro comercial The Village de la calle Sanlitun. En las mismas narices de sus empleados y guardias de seguridad, una veintena de “reventas” se acercan con la mercancía a los clientes que salen del establecimiento, donde la fiebre desatada en China por los últimos inventos de Apple ha agotado ambos productos.

Los “reventas”, apostados a las puertas de la tienda Apple a la caza de clientes

Tras salir a la venta durante los días anteriores, cada noche se formaban ante la tienda colas interminables con docenas de personas dispuestas a pasar varias horas a la intemperie con tal de llevarse los primeros iPhone 4 blancos y iPad 2 de China. Ya se sabe que tontos hay en todos los sitios y un país con 1.300 millones de habitantes no va a ser una excepción. Y, si no, que le pregunten a la madre del joven de Shenzhen que vendió un riñón por algo más de 2.000 euros para comprarse la dichosa tableta de la manzanita.

Pero no todos los que hacían cola eran impacientes “frikis” de la tecnología que no podían esperar varias semanas a comprar su aparatito. También había listos organizados en grupos de “reventas” que agotaban todas las existencias diarias de iPhone 4 blancos y iPad 2 y luego los vendían por 500 yuanes (52 euros) más de su precio original. Así, el modelo más básico de la tableta de Apple se pone en unos 4.000 yuanes (420 euros) y el teléfono en 5.000 yuanes (526 euros). “Para eso he estado esperando toda la noche en plena calle”, justifica el aumento del importe un “reventa”, convencido de que podrá colocar los modelos que ha comprado “porque en China hay mucha gente y es negocio seguro”.

Ante las aglomeraciones que se formaban cada noche ante la tienda, que han acabado en alguna que otra pelea entre “frikis” y “reventas” por un puesto en la cola, Apple ha cambiado el método de compra. Ya se sabe que el régimen chino es poco amigo de las concentraciones ciudadanas, así que ahora hay que apuntarse en una lista y esperar a que llegue el pedido.

Lo malo es que, probablemente, los “reventas” hayan copado también las listas de espera para seguir vendiendo los iPhone y iPad a las puertas de la tienda de Apple, que incluyen la garantía de fábrica pero por los que seguramente no pagarán impuesto alguno.

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