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Blogs Tras un biombo chino por Pablo M. Díez

Entrevista íntegra a la Nobel de la Paz María Ressa: “Las elecciones de Filipinas son un ejemplo de la desinformación en las redes sociales”

Premio Nobel de la Paz, la periodista filipina María Ressa atribuye a las redes sociales la desinformación del mundo actual, que permite triunfos electorales como el del hijo del dictador Ferdinand Marcos

Pablo M. Díez el

“Si Hitler hubiera tenido un hijo, que además se llamara Adolf Hitler Jr., ¿habría sido elegido por los alemanes?”. Con una habilidad excepcional para resumir la situación en una sola frase, la comparación de la periodista filipina María Ressa sobre las elecciones en su país es demoledora. Fundadora en 2012 del prestigioso y muy seguido portal de noticias Rappler, la denuncia de la corrupción y la guerra sucia contra la droga del presidente Duterte no solo le ha traído una decena de denuncias que la pueden llevar hasta seis años a la cárcel. También le reportó el año pasado el Nobel de la Paz, junto al periodista ruso Dmitry Muratov, por su lucha por la verdad y la libertad de información. Durante las elecciones de Filipinas, que ha ganado el hijo del dictador Ferdinand Marcos, atiende a ABC en la Redacción de Rappler en pleno frenesí informativo.

María Ressa, Nobel de la Paz el año pasado, nos atendió en la Redacción de Rappler durante las elecciones de Filipinas. PABLO M. DÍEZ

– ¿Qué significa su Nobel, el primero de su país, para la libertad de prensa en Filipinas?

– Para nuestro medio de comunicación, Rappler, el Nobel fue un momento de reivindicación. Han sido seis años muy duros (bajo la presidencia de Duterte) y supone un reconocimiento del comité del Nobel de que los periodistas nos hemos visto obligados a sacrificarnos y a hacer mucho más que nuestro trabajo en todo el mundo. La última vez que un periodista recibió este premio fue hace casi cien años. Fue Carl Von Ossietzky, quien no pudo ir a Oslo porque languidecía en un campo de concentración nazi. Vivimos un momento crucial, no solo para la democracia en Filipinas, sino en todo el mundo. Eso es lo que nos muestran los datos de las redes sociales, a través de las cuales se difunden las noticias hoy. La mayor plataforma mundial de difusión de noticias es Facebook. Las redes sociales han elegido deliberadamente difundir mentiras, que se basan en mensajes del odio, en lugar de hechos. Es además la misma plataforma donde la credibilidad de los medios de comunicación es atacada repetidamente por aquellos que están en el poder y no quieren responder las preguntas difíciles que hacemos los periodistas. Acabo de ver al otro galardonado, Dmitry Muratov, en Ginebra la semana pasada. Ha sido obligado a cerrar su medio de comunicación, Nóvaya Gazeta, en Rusia. El mundo no ha mejorado para los periodistas, se ha vuelto peor. Y, si es malo para los periodistas, es malo para la democracia.

– ¿Cómo está el proceso legal contra usted aquí en Filipinas, después de que fuera declarada culpable de cibelibelo en 2020 bajo la ley de delitos informáticos?

– Empezando en 2019, el Gobierno ha decretado diez órdenes de arresto contra mí… ¡Diez! Llevo ya 36 años como periodista pero, entre 2019 y 2021, en menos de dos años, el Gobierno ha intentado detenerme diez veces y he sido puesta en libertad bajo fianza en todas esas ocasiones. De esos diez cargos, tres han sido finalmente sobreseídos y todavía quedan siete abiertos. Junto a una antigua compañera, fui declarada culpable de ciberlibelo en 2020. Eso es ridículo porque ese delito no existía cuando publicamos esa historia… ¡Es como en “Minority Report”! Deberíamos haber sabido que habría una ley y no lo habríamos hecho. ¡Y eso que no hicimos nada malo! Estamos luchando contra todo eso en los tribunales. Siempre digo que estamos aguantando en primera línea, porque no voy a renunciar voluntariamente a mis derechos. Y por supuesto que Rappler va a seguir haciendo su trabajo, que es pedir responsabilidades al poder. Pero es cada vez más y más difícil.

– ¿Cómo ha cubierto las elecciones de Filipinas?

– Estas elecciones son un ejemplo de las desastrosas consecuencias de la desinformación y las operaciones de información que han sido llevadas a cabo sobre los ciudadanos de una democracia. Treinta y seis años después de que la Revolución del Poder Popular derrocara a Ferdinand Marcos y obligara a exiliarse a su familia, tenemos a su hijo con el mismo nombre. Ferdinand Marcos Jr., alguien que ha evitado todo debate en medios de comunicación tradicionales, que ha eludido preguntas de los periodistas de verdad para, como Bolsonaro (en Brasil), crear un entorno de información donde tienen sus propios videoblogueros, favorables a ellos. Ni siquiera puedo llamarlos “periodistas”; gente proclive con un teléfono móvil. Como no quieren periodistas haciendo preguntas duras, simplemente crean los suyos y eso es manipular a la gente en cualquier democracia del mundo. Cuando eso ocurre, si no tienes los hechos, si no tienes la totalidad de los hechos, ¿cómo vas a saber a quién votar? ¿Cómo vas a tener integridad en esas elecciones?

El portal de noticias Rappler, fundado por María Ressa en 2012, en plena cobertura de las elecciones de Filipinas. PABLO M. DÍEZ

– ¿Cómo es posible que suceda algo así?

– Parte de la razón se debe a que las plataformas de comunicación que llegan a la audiencia, donde probablemente vas a volcar esto, están permitiendo que las mentiras se distribuyan más y más rápidamente que las noticias. Sin noticias, tienes este mundo al revés con lo “nuevo correcto”, como yo lo llamo. Gente como Duterte, que fue elegida con la ayuda de las redes sociales; como Jair Bolsonaro en Brasil, que era una figura secundaria hasta que Youtube puso el foco sobre él. Mira a Modi en la India. Y ahora Ferdinand Marcos Jr. en Filipinas. Rappler ha invertido mucho tiempo analizando los datos y mostrando las pruebas de cómo la operación de información de los Marcos ha cambiado la Historia delante de nuestros ojos. Su padre, Ferdinand Marcos, que fue acusado de haber robado 10.000 millones de dólares en 1986, es ahora el “mejor dirigente que esta nación ha tenido nunca”. Son mentiras descaradas que la gente normal se cree porque se repiten un millón de veces.

– ¿La victoria de Marcos será una vuelta a los días de la dictadura de su padre? ¿Cómo va a afectar a los periodistas y a las libertades en Filipinas?

– Voy a citar a un colega, John Nerry, que destaca las cuatro erres en la victoria de Marcos: rehabilitación de su padre y su legado, cambiando la Historia como ya se ha hecho con la desinformación; repudio de la Revolución del Poder Popular, que es celebrada como una fiesta en Filipinas. ¿Seguirá siéndolo bajo la presidencia de Marcos? Reposesión de todos sus activos ocultos y viejos. Como recordarás, Marcos fue el primer cleptócrata. Acabo de volver de Suiza, donde he hablado con banqueros que recordaban que, con Marcos, fue la primera vez las autoridades de ese país ordenaron la devolución de fondos ingresados en sus cuentas, famosos por su secretismo. La última erre es la de realineamiento, y eso es con China. Muchas cosas cambiarán con la presidencia de Marcos. Pero yo voy a destacar esto. No sean autocomplacientes en España. Si esto nos ocurre a nosotros en Filipinas, si perdemos nuestra democracia, les puede a ocurrir a ustedes.

– ¿Cuáles son los mayores problemas de Filipinas?

– La batalla por los hechos, la batalla por la verdad. Si puedes cambiar la Historia delante de nuestros ojos… Milan Kundera ya lo dijo: La lucha del hombre contra el poder es la lucha de la memoria contra el olvido. Bueno, pues hemos olvidado. Y el poder puede volver a consolidarse. Eso es exactamente lo que estamos viendo aquí. La batalla por la verdad es importante. También el cambio climático. Con más de 7.000 islas y 110 millones de habitantes, Filipinas es la tercera nación con mayor riesgo de catástrofes naturales del mundo. Y el último, como el resto del mundo, la salud durante la pandemia, cómo tratar con este virus mientras evoluciona. Como podemos ver, la Administración de Duterte realmente fracasó a la hora de proporcionarnos vacunas a tiempo. Fuimos con unos seis meses de retraso con respecto a otras naciones en conseguir el suministro de las vacunas. Cuando finalmente conseguimos vacunar a nuestra gente, fuimos con retraso con las dosis de recuerdo. Pero, más allá de eso, el confinamiento ha mostrado globalmente que se han exacerbado las diferencias entre los ricos y los pobres, y Filipinas sigue esa tendencia. Todo esto está en el último informe de Oxfam: los ricos se hacen más ricos y los pobres más pobres. En Filipinas, se deberían haber promulgado tres leyes de auxilio social durante la pandemia. Solo se aprobaron dos y ambas beneficiaron a los grandes negocios, a las grandes corporaciones, permitiéndoles seguir con su red de seguridad. Pero la tercera ley, que nos debería haber dado una red de seguridad social, nunca fue aprobada. Millones de personas han perdido sus trabajos y luchan por sobrevivir en un momento en que tienen muy poca ayuda del Gobierno.

Por sus informaciones críticas sobre el Gobierno de Duterte, Ressa ha sido condenada por ciberlibelo y se enfrenta a varias causas judiciales. PABLO M. DÍEZ

– En esta lucha por los hechos y la verdad, ¿cómo ha podido el hijo del dictador convencer a tanta gente en su campaña?

Si Hitler hubiera tenido un hijo, que además se llamara Adolf Hitler Jr., ¿habría sido elegido por los alemanes? La principal razón por la que esto ha ocurrido en Filipinas es por una operación de información. Este ha sido el impacto de la desinformación. Ha roto la Historia, literalmente cambiado lo que la gente piensa. En mi conferencia del Nobel dije que las redes sociales se han convertido en un sistema de modificación del comportamiento, y somos perros de Pavlov con los que están experimentando en tiempo real. Estas elecciones han sido un ejemplo de los males de las redes sociales.

– ¿Necesitamos leyes que nos protejan de las noticias falsas o rumores? ¿No es una línea muy débil con la censura?

– No es solo en Filipinas. Cuando estuve en Ginebra, hablé con un periodista brasileño que había sido agredido por la gente de Bolsonaro. ¿Qué han hecho? Han expulsado a los medios tradicionales, porque ¿quién quiere responder preguntas incómodas sobre responsabilidad hechas por periodistas de verdad? Ya no tienes que hacerlo con las redes sociales. Lo que hacen es ignorarlos con las redes sociales. La campaña de Marcos ha sido conducida mayormente a través de la plataforma que había empezado a construir en 2014 con las redes sociales: ya sea Youtube, Tiktok, Facebook o Twitter… En realidad, Twitter expulsó a la maquinaria de propaganda de Marcos y canceló sus nuevas cuentas. Lo que Bolsonaro y Marcos han hecho es ignorar a los periodistas que hacen preguntas complicadas y han creado a sus propios videoblogueros. Han establecido una falsa equivalencia, haciendo muy difícil que los ciudadanos distingan entre la propaganda que usa la forma de la información y las noticias. Y esa será la muerte de los hechos, esa será la muerte de la verdad. La respuesta a tu pregunta: ¿qué deberíamos hacer sobre eso? Tenemos tres pilares en Rappler: tecnología, periodismo y comunidad. En los dos últimos años he estado trabajando en diferentes países, he testificado en muchos de estos procesos buscando una legislación. La Unión Europea acaba de aprobar el Acta de Servicios Digitales y el Acta de Mercados Digitales. Son probablemente las primeras leyes más efectivas de todas las que hemos visto hasta ahora, porque no se quedan solo en la moderación de contenidos. Eso es buscar en el lugar equivocado. Hay que mirar a la amplificación del algoritmo. Eso no va de la libertad de expresión, sino sobre la libertad de alcance, sobre la distribución. Las mentiras consiguen una mayor distribución que los hechos. Finalmente, es el modelo de negocio. ¿Quién posee sus datos? Capitalismo de vigilancia es una expresión acuñada por Shoshana Zuboff, pero este problema es antimonopolio, es privacidad, seguridad y, por último, moderación de contenido. Rappler también está construyendo su propia tecnología, donde los usuarios puedan hablar con seguridad, ya que las redes sociales se han convertido en plataformas de pensamiento rápido donde la gente vuelca sus emociones. Las llamo lodo tóxico porque potencian la rabia, el odio y las teorías de la conspiración, lo peor de la naturaleza humana. ¿Qué pasa con la inspiración? Y así es en realidad como luchas contra todo eso. Zelenski lo ha hecho. Ha inspirado no solo a Ucrania, sino al resto del mundo. Esto es lo que hemos visto aquí con Leni Robredo en Filipinas, una chispa de inspiración. Lo segundo son los medios de supervivencia del periodismo. El modelo de negocio, la credibilidad del periodismo… Todo atacado por las plataformas tecnológicas. Las mujeres son atacadas al menos diez veces más que los hombres aquí en Filipinas. Hay mujeres periodistas y políticas que han decidido no seguir con su trabajo por la desinformación de género. El tercer pilar es la comunidad. Cuando convences a alguien para que crea una mentira, es como si estuvieran infectados con un virus. Y están enfermos. Tienes que darles una medicina o rehabilitarlos hasta que se curen, ya sea en Filipinas o en EE.UU., donde había más votantes de Trump y la violencia estalló el 6 de enero de 2021 por la desinformación. Esto es un problema global y debemos encontrar una solución global o la democracia no sobrevivirá.

Ferdinand Marcos Jr., alías Bongbong, cerró su campaña electoral con un multitudinario y festivo mitin en Manila. PABLO M. DÍEZ

– Pero hay una línea muy delgada entre la ley y la censura. Por ejemplo, en Twitter con Elon Musk. ¿Qué piensa que va a hacer y cómo va a afectar a las discusiones globales?

– Son dos asuntos distintos. Primero, la censura requiere que tengas a funcionarios del Gobierno, porque es el Gobierno el que la impone. Pero estas son compañías privadas y hay que responsabilizarlas por tergiversar nuestro ecosistema de información. Ese es el primer paso. Y no es sobre el discurso o el contenido. Es sobre el hecho de que ponen el mundo al revés permitiendo que las mentiras se difundan más y más rápido que los hechos. Hay que ir a por la amplificación del algoritmo porque todos caemos en esa trampa. Han creado normas completamente nuevas, que han destrozado los controles y equilibrios del poder y han hecho que los periodistas y activistas de derechos humanos sean más vulnerables. No deberíamos sacrificar tanto. ¡Están muriendo periodistas! Yo puedo ir a la cárcel el resto de mi vida solo por hacer mi trabajo, porque las plataformas tecnológicas quieren ganar más dinero. Eso está mal. Hay que detener esta insidiosa manipulación de las mentes y no es un problema de libertad de expresión. Estas plataformas ya han hecho grandes cambios en nuestro escenario informativo, como se ve con los líderes derechistas, populistas y autoritarios que han sido elegidos con la ayuda de las redes sociales. No asumen sus responsabilidades, actúan con impunidad. Es hora de pedir responsabilidades a las tecnológicas. Estas plataformas han ganado tremendas cantidades de dinero usando nuestros datos privados, sin pagarnos nada por ellos, poniéndonos en el objetivo, manipulando insidiosamente nuestras mentes. ¡Esto tiene que parar! Las ideas de Silicon Valley sobre la libertad de expresión han infectado al mundo con el virus de la mentira. ¡Paren eso! ¿Por qué debemos permitir que esto ocurra? ¿Por qué un solo hombre, en este caso Mark Zuckerberg, un joven blanco, puede decirle al resto del mundo cómo vivir nuestras vidas y en lo que deberíamos creer? Globalmente, es un momento trascendental, con más de treinta elecciones en todo el mundo. Si no tienes los hechos, no puedes elegir y la democracia estará muerta.

– ¿No es una ironía que pensáramos que la tecnología nos iba a hacer más libres y somos incluso más esclavos, o incluso más vagos, porque la gente solo quiere leer los titulares que le gustan?

– Esto ya se ha visto en la Historia. Vimos lo que sucedió en la Alemania nazi y hemos visto lo que ocurre en Rusia, donde ya están ocurriendo numerosas atrocidades. Pero no me dejes que me vaya por ahí, probablemente es demasiado. Déjame que responda tu pregunta directamente. La tecnología juega con nuestras mentes. Nuestras mentes han sido manipuladas insidiosamente. En este caso, países democráticos como EE.UU., donde están las cinco primeras compañías tecnológicas del mundo, han permitido que la búsqueda del beneficio nos manipule a todos en sus plataformas. Usan nuestra biología contra nosotros. Tienes que mirar al comportamiento humano emergente. Cuando tu ecosistema de información fomenta el odio, la rabia y las teorías de la conspiración, saca a relucir lo peor de cada uno de nosotros. Cuando las pruebas demuestran que ha habido genocidio en países como Myanmar (Birmania), tanto la ONU como Facebook envían gente allí y están de acuerdo en que ha sido posible gracias a Facebook. Esto es como en Ruanda otra vez con la radio, pero mucho más y mucho peor porque es global. Es el momento de arreglar el problema. Y está claro cuál es el problema. Pero tienes, como algunos legisladores americanos han destacado, decenas de miles de enviados de los “lobbies” contra los congresistas que todavía tienen que entender el impacto de la tecnología en nuestras mentes. Necesitas un departamento de negocios mejor para proteger nuestras mentes, ¿verdad? De todas maneras, ya hemos vivido esto antes y esta es la razón por la que dije en la conferencia del Nobel que tenemos que volver al momento justo después de la bomba atómica. Ha habido una bomba atómica silenciosa que ha explotado en nuestro entorno informativo y estamos todos muriendo lentamente. En Filipinas lo llamo muerte por mil cortes. Aquí seguimos y soy optimista, pero el momento es ahora.

Largas colas para votar en las elecciones de Filipinas, que ganó el hijo del dictador Ferdinand Marcos. PABLO M. DÍEZ

– ¿Cuál es el legado del presidente Duterte? ¿Habrá una investigación independiente de la guerra sucia contra las drogas? Y, a pesar de toda esta violencia y muerte, ¿por qué lo apoya tanta gente?

– Es una combinación de operación informativa y redes sociales. Cualquiera que cuestione la guerra contra las drogas que empezó en 2016 es machacado hasta el silencio. Número uno es condenar al silencio, suprimir ese relato. Y número dos es reemplazarlo. Las redes sociales han sido usadas como un arma. Y ese uso de las redes sociales como arma fue luego usado para armar la ley. Esto es algo que yo he vivido personalmente. A los seis meses de tomar posesión Duterte, ocurrió de nuevo lo mismo. Elegido democráticamente, como Hitler, y, una vez en el poder, dinamitó las instituciones desde dentro. Eso es lo que ha ocurrido en Filipinas.

– ¿Cómo está la economía después del impacto de la pandemia?

– Es un desastre, como en muchas partes del mundo, pero la propaganda… Diría que lo mejor de la Administración de Duterte es que son geniales en las operaciones de información, en propaganda. Y la han usado gracias a las plataformas de redes sociales. La gente no tiene ni idea de cuántos muertos ha habido en la guerra contra la droga, cómo van a conseguir comida, dónde se van a contar los votos… Todas estas cosas, que son tan necesarias en una democracia, han sido sacadas del debate y lo único que importa es de qué lado estás. Es como convertir la democracia en un partido de baloncesto, o en una lucha de gladiadores hasta la muerte, porque eso es lo que está ocurriendo en Filipinas. Nuestra economía, como todo lo demás, ha sido devastada pero, más que eso, ha habido grandes escándalos de corrupción. Y, de nuevo, ¿podemos averiguar la verdad sobre ello? No en este escenario informativo porque se han construido cleptocracias.

Antes mencionó el realineamiento de Filipinas con China. ¿Cómo ve la posición de Filipinas en este mundo polarizado, y más en una región crucial como el Indopacífico?

– El equilibrio de poderes geopolíticos es otro factor de la desinformación porque el mar del Sur de China, que aquí llamamos mar del Oeste de Filipinas, es una ruta marítima clave en el mundo. Parte de la razón por la que Filipinas tiene un papel en el poder geopolítico es por este lugar geográfico en el que nos asentamos. Filipinas ha sido un estrecho aliado de EE.UU., pero ahora tenemos que esperar a ver. Esto ocurre globalmente. Mira lo que ha hecho la desinformación. En 2014, Crimea fue anexionada por Rusia. Con el mismo relato plantado entonces, Rusia ha invadido Ucrania. ¿Estaría el planeta al borde de una tercera guerra mundial si el escenario de la información no hubiera sido tan corrompido? ¿Se creería la gente mentiras tan indignantes? No, no en mi viejo mundo. Y, chico, ¡cómo añoro ese viejo mundo!

Rodeado de carteles electorales, un niño juega a policías y ladrones en un arrabal de Manila. PABLO M. DÍEZ

– ¿Después de esta pandemia y de la guerra de Ucrania, estamos viviendo el fin de la globalización y la vuelta a un mundo dividido en bloques?

– Es difícil decirlo. Ahora mismo, el mundo se enfrenta a un momento existencial en el que nos une la comunicación. Me convertí en periodista porque sé que la información es poder. Y, ahora mismo, así es cómo conseguimos justicia. Pero, cuando la información se ha tergiversado, cuando los canales de distribución de los hechos están corrompidos, entonces el mundo está al revés. Arreglemos eso primero y luego continuemos, porque el resto de problemas del mundo sigue ahí. Pero la tecnología, como un elemento decisivo, nos ha lanzado al desastre.

– ¿Qué le dijo Muratov, el otro galardonado con el Nobel el año pasado, de la situación en Rusia y la guerra en Ucrania?

– Eso deberías preguntárselo a él. Pero Nóvaya Gazeta ha sido obligada a cerrar. No puedes usar la palabra “guerra” en Moscú. Muchos periodistas extranjeros se han marchado. Y tienes a muchos rusos creyéndose las mentiras de Putin: que hay una nazificación contra la que están luchando. Eso es jugar con nuestras mentes. La propaganda al estilo tradicional se ha quedado antigua. La nueva es meterte droga directamente en el cerebro. Este es un mundo nuevo. Lo que sí creo que ha ocurrido es que nos ha obligado a una confrontación. Putin nos ha forzado a un enfrentamiento. El mundo tendrá que decidir cuánto tiempo más vamos a mirar. Por otra parte, diría que el acto de una sola persona como Zelenski, que ha decidido quedarse, ha inspirado a los ucranianos para luchar. Sin Zelenski, puede que Putin hubiera conquistado Ucrania en un solo día. Pero, porque una persona se ha quedado, no solo ha inspirado a su pueblo, sino al resto del planeta. Y el mundo libre se ha unido de una forma que no habíamos visto desde que la tecnología fastidiara nuestro escenario de la información.

– ¿Hay un rayo de esperanza, porque estas autocracias, como Rusia y China, pensaban que Occidente era demasiado débil como para reaccionar?

– La razón por la que Occidente es demasiado débil para reaccionar es porque no tiene la información. Seríamos manipulados a niveles celulares por estos americanos… Pero ahora es por China con Tiktok. ¡Arreglemos eso primero! Eso está totalmente dentro del control de los legisladores. Creo que, de algún modo, han renunciado a su responsabilidad de protegernos. Dije esto en la conferencia del Nobel. En la primera página, quería dejar claro que debemos tener esperanza porque todavía creo en la bondad del ser humano. ¡Sí, porque siempre reaccionamos al límite! Nos podríamos haber destruido después de 1945. La bomba atómica mató a 140.000 personas en un instante. He visitado Hiroshima y quedé impresionada con los “hibakusha”, los supervivientes del holocausto nuclear, que han dedicado el resto de su vida a la paz. Creo en la bondad del ser humano. No he tirado la toalla. Veamos qué pasa en Filipinas.

La Policía levanta un cadáver de la “guerra sucia” contra la droga lanzada por el presidente Duterte. PABLO M. DÍEZ

– ¿Cuál es la influencia de China en Filipinas y cómo ve esta carrera de las dos superpotencias aquí en Asia?

– Eso se ve globalmente. China tiene una visión a largo plazo de lo que es y Asia está viendo lo que pasa en Rusia, especialmente Taiwán. Pero mira lo que ha ocurrido en Hong Kong. La Ley de Seguridad Nacional se aprobó al mismo tiempo que aquí la Ley Antiterrorista. China no está solo en Asia; ha invertido mucho dinero en países africanos. Poder y dinero. Eso es lo que estamos viendo. Y el juego del poder geopolítico determinará si las autocracias ganan, y las democracias mueren, o si las democracias son capaces de enfrentarse a ellas. Y eso no ocurrirá si nuestro entorno informativo está corrompido.

– Última pregunta, María. ¿Seguirán usted y Rappler si vuelvo a las próximas elecciones dentro de seis años? ¿Qué me encontraré?

– Llevo ya 36 años como periodista. Estaba aquí antes de Duterte y seguiré después de él. Pero, con Marcos, veamos qué pasa. Creo que el mundo está en un momento crucial. Debería preguntarte a ti. ¿Podrá España aguantar? ¿Sabes cuáles son los hechos? Si estáis en las redes sociales tanto como los filipinos, no los sabéis. Pero diría que somos los canarios en la mina, y esto es algo que dijo una de las filtraciones de Cambridge Analytica. Durante seis años seguidos, los filipinos son los que más tiempo pasan en internet y en redes sociales del mundo. Por eso, adonde vamos nosotros, iréis vosotros.

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