Esa FIFA descabezada en la que nadie saber quien manda y quien puede mandar acaba de desviar la atención de las nuevas investigaciones policiales, bancarias y fraudulentas con la sanción al Real Madrid y al Atlético de Madrid por presuntas ilegalidades en la inscripción de jugadores menores como Luca Zidane y Theo Zidane, hijos del entrenador, y del hermano del exdefensa madridista Garay. El cambio en la reglamentación de la FIFA para perseguir el mercadeo de niños no puede suponer que se acuse injustamente a clubes como el Real Madrid por 39 fichajes de chavales extranjeros que son unos privilegiados al jugar en el Madrid. Son 39 chicos de clase media alta, sus padres trabajan en Madrid, todos tienen residencia en España, estudian aquí y pueden ser cualquier cosas como jóvenes explotados por los padres o los clubes. Han errado el tiro gravemente.
La FIFA quiere perseguir ese mercadeo y donde tiene que actuar es en el fútbol suramericano y el africano, que es de donde proceden los posibles niños explotados. Esos chicos llegan a clubes modestos de muchos países de la Unión Europea y sí son explotados por padres y representantes, que cobran por llevarles porque alguno llegará y será rentable por todos, como así sucede. Luego, ese alguno juega y cobra dinero, pero otros se quedan tirados en ciudades de medio pelo y ni clubes ni viejos apoderados se preocupan de ellos. Ahí es donde FIFA tiene que trabajar. Pero dl Real Madrid no hace nada de eso. Al revés, mima a los niños, que son privilegiados.
La FIFA señala al Madrid por 39 casos y varios de ellos son hijos de Zidane y un hermano de Garay. Solo escuchar esto se desmonta todo el informe del máximo organismo del fútbol. Los requisitos quie pide la FIFA para inscribir a un niño extranjero son agotadores, discriminatorios e inconstitucionales respecto a lo que se pide para un niño del país donde se juega. Y el Real Madrid ha presentado en la Federación de Fútbol de Madrid todos esos papeles, que son una ristra tan alucinante como la acusación a los Zidane:
1, Solicitud del niño ante la Federación de Madrid para ser inscrito en un equipo de categorías, en este caso el Real Madrid.
2, Pasaporte de los padres y del niño.
3, Permiso de residencia en España de los tres.
4, Contrato de trabajo del padre y de la madre en la ciudad del equipo (si uno está en el paro, el niño no puede jugar,, es decir, el precio que pagan es doble).
5, Certificado de empadronamiento de los tres.
6, Partida de nacimiento del niño.
7, Declaración jurada ¡del niño! de que nunca ha jugado en otro club afiliado a FIFA.
8, Documento firmado por los padres explicando, si procede, de su traslado a vivir a España.
9, Documento de declaración de los padres sobre su sustento económico, con presentación de nóminas y cuentas bancarias para demostrar que pueden vivir en España y en Madrid.
10, Certificado del club que precisa que van a fichar a ese niño.
Si después de todo esto el niño está vivo, los clubes lo inscriben. Pues el Real Madrid ha cumplido todos los requisitos con cada uno de los chicos extranjeros que tienen el privilegio de militar en el Real Madrid, para envidia de sus amigos. Y en ABC, en la Federación de Madrid y en todos los campos de fútbol modestos de España se escuchan las quejas de cientos de miles de niños argentinos,. rusos, rumanos, ecuatorianos, paraguayos y colombianos que no pueden ser inscritos en las federaciones porque sus padres están en el paro, un hecho totalmente discriminatorio con los niños españoles, que pueden jugar en las competiciones federativas aunque sus padres también vivan en el paro. ¿Y yo le pregunto a la FIFA?: ¿los hijos de españoles no son explotados por sus padres al jugar en los alevines, cadetes y juveniles de los grandes equipos en busca de un seguro económico que les valga para todos? Yo les aseguro que los hijos de españoles son los más explotados, con los padres detrás de ellos para vivir de ellos, controlando sus nuevos contratos y renovaciones.
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